Pese a que Génova lo haya negado en múltiples ocasiones, el ex director general del FMI es la persona elegida por Rajoy para sustituir a Miguel Blesa al frente de la cuarta entidad de España y así se lo hizo saber a Esperanza Aguirre el pasado jueves en una tensa reunión en la que rechazó de plano al candidato de la presidenta madrileña, su número dos, Ignacio González. En dicho encuentro, Rajoy y Aguirre trataron de acercar posturas para proponer un nombre de consenso. Sin embargo, en una entrevista concedida hoy a Antena 3, Rajoy ha asegurado que «no está negociando nada» con el PP madrileño. El cambio de tendencia lo ha confirmado el secretario general del PP madrileño y uno de los principales aguirristas, Francisco Granados, quien ha afirmado que fue la presidenta regional quien propuso a Rajoy que Rato presidiera Caja Madrid. Así, ante la crisis interna que está viviendo el PP por Caja Madrid, que tiene su máximo exponente en la dura entrevista concedida por el vicealcalde de Madrid a EL PAÍS el pasado lunes, el líder de la oposición ha defendido sus tiempos y ha señalado que «la clave» es saber tomar las decisiones en el momento en que hay que tomarlas. «Yo manejo mis tiempos y tomo mis decisiones en el ejercicio de mis responsabilidades», ha asegurado. Rajoy ha defendido la figura de Esperanza Aguirre, una de sus máximos rivales dentro del PP, de quien ha dicho que lo está haciendo muy bien y que la volvería a elegir como candidata para presidir la Comunidad de Madrid. La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, ha apostado también por Rodrigo Rato para presidir Caja Madrid, a pesar de que es la única dirigente del PP que ha apoyado a Esperanza Aguirre en su cruzada contra Manuel Cobo. Sobre Aguirre, Sánchez Camacho se ha mostrado convencida de que la presidenta de Madrid quiere al frente de la entidad «al más profesional».
