Las excavadoras derriban los restos del Sagrado Corazón

La demolición del tercio del edificio del colegio concertado Sagrado Corazón de Madrid que quedó en pie -tras el derrumbe de las pistas deportivas de la azotea sufrido el 25 de diciembre- ha comenzado pocos minutos antes de las diez de la mañana. Los alumnos de este centro, situado en la calle Paraguay del distrito de Chamartín, no retomarán sus clases en la sede que el mismo colegio tiene en la calle Alfonso XIII, como habían pensado sus responsables. Anoche, Urbanismo decretó la clausura provisional de estas instalaciones por unas "pequeñas fisuras" en las vigas. La solución la ha dado la Comunidad de Madrid, que les ha cedido parte del colegio público Miguel Hernández, en el distrito de Latina, que tiene 1.040 plazas.

Esta mañana, miembros del equipo directivo del Sagrado Corazón han visitado junto al director del Área Territorial de Madrid Capital, Bonifacio Alcañiz, y algunos padres del Consejo Escolar las dos instalaciones que Educación había propuesto para ubicar a los alumnos de Primaria, Secundaria y Bachiller del centro. Los responsables del Sagrado Corazón han aceptado el ofrecimiento de la Consejería después de que el Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid determinara la clausura provisional "para uso educativo" del edificio principal del colegio, en Alfonso XIII, 127, lo que les ha obligado a cambiar sus planes para la vuelta a clase.

El Miguel Hernández, situado en el distrito de Latina, al otro lado de la ciudad, dispone de 18 unidades de Primaria con 504 plazas, 12 de Secundaria con 396 plazas y cuatro de Bachillerato con 140 plazas, lo que, según han indicado fuentes de la Consejería de Educación, cubriría las necesidades de escolarización de los alumnos. Se trata de un centro público que se utiliza para acoger a los alumnos de otros en los que se acometen obras de infraestructuras, independientemente de que sean de titularidad privada.

Al otro lado de la ciudad

Ahora, los responsables autonómicos de Educación colaborarán con la dirección del Sagrado Corazón para preparar todo lo necesario de cara a la mudanza, por ejemplo el mobiliario, en los próximos días con el objetivo de abrir cuanto antes, a ser posible el día 8, como el resto de los niños madrileños. Asimismo la Consejería de Educación había ofrecido las instalaciones del colegio público Guatemala, en el distrito de Fuencarral, con 9 unidades de 2º ciclo de Infantil para 252 niños, pero los responsables del Sagrado Corazón han optado por escolarizar a los menores en un centro de su congregación, como tenían previsto.

Hasta que el Ayuntamiento le comunicó hoy la clausura provisional para uso educativo de su edificio de la calle de Alfonso XIII, la dirección del Sagrado Corazón había planeado agrupar en él a los alumnos de las dos clases de 2º de Primaria que estaban en el inmueble derrumbado, junto al resto de los estudiantes más mayores. Los de Infantil, que también se han quedado sin edificio, irán, como estaba previsto, a nueve aulas prefabricadas en otro centro privado cercano, también en el distrito de Chamartín. Se trata del colegio de las religiosas del Sagrado Corazón, en el número 12 de la calle Santa Magdalena Sofía.

Estos niños tendrán dos días más de vacaciones, ya que no tendrán que ir a clase hasta el día 11. En un comunicado, el centro informó la pasada madrugada de "la decisión de Gerencia de Urbanismo de determinar la clausura provisional hasta no tener seguridad absoluta por parte de la Administración competente, se prescribe una revisión exhaustiva durante un tiempo relativamente dilatado".

Comienza la demolición de los restos del colegio afectado por el desplome