Garzón envía a prisión a seis de los siete detenidos por actos de violencia callejera

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha ordenado el ingreso en prisión incondicional y comunicada de seis de los siete detenidos esta semana en el País Vasco en una operación del Cuerpo Nacional de Policía contra la violencia callejera. Garzón les acusa de integración en banda armada y varios delitos de terrorismo. El otro arrestado, Zigor Goikoetxea, ha quedado en libertad bajo fianza de seis mil euros por motivos de salud.

Joseba Elorriaga, Txomin Gezuraga, Aner Mimenza, Mikel de Gregorio, Josu Rodríguez y Lander Labajo fueron detenidos el pasado miércoles en Getxo y Berango (Vizcaya), mientras que Zigor Goikoetxea fue arrestado ayer en Getxo. Debido a los problemas psiquiátricos que padece Josu Rodríguez, el titular del Juzgado Central de Instrucción número cinco acuerda que su ingreso en prisión "deberá producirse en condiciones adecuadas" en el hospital penitenciario.

De acuerdo con el auto, los siete formaban parte de un grupo de kale borroka junto a Mikel Recarte y Jon Rosales, en busca y captura, y se les acusa de varias acciones de sabotajes cometidas de 2004 a 2007, entre las que se incluyen la quema de contenedores y de cajeros de bancos, apedreamiento de autobuses, cortes de catenarias y un ataque al batzoki del PNV en Getxo. También les atribuye la elaboración de varios cócteles molotov que planeaban lanzar el pasado 13 de octubre contra la vivienda del portavoz socialista en Getxo Joseba Marcaida "con riesgo cierto para la vida de los moradores".

Además, Garzón hace constar que en el registro practicado en el domicilio de Lander Labajo, que, al igual que Aner Mimenza figuran como personas captadas por ETA, según el juez, se halló una fotografía de concejales del PP de Getxo y un manual de ataques a obras públicas.

En los interrogatorios todos han estado asistidos por un abogado de su confianza salvo Josu Rodríguez, que ha permanecido en situación de incomunicación, han detallado fuentes jurídicas, y todos han negado las acusaciones.

En el marco de la operación, aún abierta, también ha sido hallado un zulo en la zona del monte de Larrañazubi (Vizcaya) que contenía varios cócteles-molotov, recipientes con una sustancia que podría ser ácido sulfúrico, un bote de laca y dos cócteles molotov preparados y listos para ser usados. También se ha localizado un depósito oculto tras unos matorrales, donde se encontró una garrafa de 5 litros de gasolina, un recipiente de los que se usan para aceite de vehículos y siete neumáticos de los utilizados en actos de protesta.

Algunos de los nombres de los detenidos figuraban en los papeles incautados en 2002 al dirigente de la banda terrorista Ibon Fernández Iradi, Susper.