Tres miembros de una familia mueren en un incendio en un piso de Barcelona

Tres miembros de una misma familia, un matrimonio de 66 y 59 años y su hijo de 38, han muerto esta mañana en Barcelona intoxicados por el humo de un incendio declarado en un piso inferior al suyo. El suceso, en el que otras dos personas han resultado intoxicadas por el humo, se ha producido en el número 79 de la calle Tamarit, en el barrio barcelonés de Poble Sec.

El fuego se ha declarado sobre las siete de la mañana en el quinto piso del edificio, de siete plantas más ático. Los aproximadamente 20 vecinos que estaban en el inmueble han sido desalojados, pero ya en los primeros momentos se ha echado de menos a los tres miembros de esta familia. Finalmente, extinguido el incendio, se ha conocido la tragedia. Los tres han sido hallados sin vida en el séptimo piso, probablemente intoxicados por el humo mientras dormían, aunque aún no se ha podido determinar exactamente la causa de sus muertes.

El quinto piso ha resultado totalmente calcinado, y el humo ha afectado también al sexto, séptimo y ático inmediatamente superiores. El jefe de los bomberos ha informado de que el incendio ha sido muy virulento y que en un primer momento las llamas salían por las ventanas del piso en el que se ha originado.

Recién prejubilados

Según han relatado los vecinos, el matrimonio fallecido se acababa de prejubilar. Eran Mercedes R.F., de 66 años, y José Antonio P.A., de 59. Su hijo, Alberto P.R., de 38 años, no vivía habitualmente con sus padres, aunque los visitaba a menudo y se quedaba a pasar la noche.

Además de los fallecidos, otras dos personas han resultado heridas. Una de ellas ha sido rescatada por los bomberos en el mismo piso quinto primera donde se ha declarado el fuego y otra ha sido encontrada en el rellano del cuarto, adonde habría bajado por sus propios medios y donde también ha sido rescatado.

Algunos vecinos, desde la calle, contaban que el fuego quemaba "con mucha fuerza", que había mucho humo, que las llamas eran muy altas y que "todo ha ido muy rápido". La mayoría de los cerca de 20 vecinos que han sido desalojados ya ha regresado a sus casas, ya que el edificio no sufre daños estructurales, según los Bomberos de Barcelona. En concreto, únicamente el piso donde se ha iniciado el fuego, el quinto primera, ha quedado muy dañado por efecto de las llamas, mientras que hasta la cuarta planta las viviendas no han sufrido ningún desperfecto.