Muere el cubano más longevo

Benito Martínez Abrogan, el cubano más anciano y una figura estrella del régimen castrista en su esfuerzos por promover la vida saludable entre los ciudadanos, murió este miércoles. Su secreto era un dieta muy sana basada en vegetales, algo de carne y alcohol de vez en cuando. "Ha muerto esta tarde, estuvo en cuidados intesivos pero su edad fue el gran problema", dijo un oficial cubano en el Hospital Ciego de Ávila en Cuba.

Martínez atribuía su longevidad a una dieta sana basada en vegetales frescos, algo de carne y ocasionalmente consumía alcohol. Nació en Haiti en 1880 y emigró a Cuba para trabajar en las plantaciones de caña de azucar en 1925 de acuerdo con sus documentos cubanos.

No fue considerado el hombre más viejo del mundo porque no tenía un documento oficial que acreditase su edad. El Record Guinness lo tiene Elizabeth Bolden una norteamericana de Tennessee, que es la persona más vieja que sigue viva.

Martínez era la principal estrella del Club de los 120 años, creado por Eugenio Selman, psiquiatra personal de Fidel Castro, para promover el estilo de vida sana entre los ancianos. A su edad Benito Martínez tenía una dolencia de corazón y necesitaba un bastón para caminar pero no usaba gafas y tenía buen oído.

El régimen cubano alardea de elevar la esperanza de vida a 77 años, siendo la media más alta entre los países en vias de desarrollo y situandose a la altura de los paises industrializados. Un estudio reciente dice que más de 2500 cubanos de los 11 millones que tiene la isla, superan los 100 años, la mayoría de ellas mujeres. El estudio atribuye al país el mayor número de ancianos que se controlan en el consumo de alcohol pero que se dan el gusto en sexo, cigarrillos y café.