Zapatero: "En términos jurídicos, nación es España"

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha argumentado hoy que reconocer el "sentimiento nacional" de Cataluña es viable sin que ello afecte al modelo de Estado ni a la soberanía. Además, ha realizado una analogía entre la aparición del término "nación" en el preámbulo del Estatuto con la distinción entre pueblos de España y el pueblo español en la Constitución.

Entrevistado por alumnos del instituto Jabalcuz de Jaén, Zapatero ha señalado que "jurídicamente, desde el punto de vista constitucional, es más correcto que nación se reserve para el conjunto, para España". Sin embargo, ha expresado su convicción de que la nación como sentimiento de una gran parte de los catalanes "es algo que hay que respetar también". El jefe del Ejecutivo ha dicho que nación es el conjunto de personas que están unidas por un vínculo, que tienen una historia común, que desean vivir de manera unida, quieren un proyecto colectivo y, en definitiva, tienen una identidad fuerte y asentada de pasado y con voluntad de futuro.

Desde esa perspectiva, ha recordado que la Constitución, en su preámbulo, habla de los "pueblos de España", para, a continuación, en los títulos siguientes, hablar del "pueblo español". "Si eso no parece que sea una gran contradicción no tendría por qué serlo algún tipo de reconocimiento del sentir catalán en el Estatuto", ha afirmado. "Lo peor que podemos hacer", dice el presidente, "es entrar en un batalla por las palabras, que tienen diversas interpretaciones y se utilizan para objetivos distintos".

Negociación en el Congreso

Zapatero ha hecho estas declaraciones un día antes de que el PSOE y los partidos catalanes que apoyan la reforma del Estatuto se reúnan mañana en el Congreso para cerrar el capítulo de las competencias, informa Efe. El encuentro se prolongará, previsiblemente, hasta el viernes con el fin de analizar también los aspectos que se refieren al lugar del texto que ocupará el término "nación" y la financiación.

Los negociadores van a centrar su discusión en los artículos que hablan, entre otros asuntos, de la educación, la inmigración o la lengua, es decir, algunas de las cuestiones que más polémica están suscitando entre las partes. También se tratarán las competencias sobre cultura, obras públicas, ordenación del territorio, organización de la administración pública catalana, seguridad social, sanidad o seguridad.

En otro orden de cosas, durante su encuentro con los alumnos, Zapatero ha calificado de "positivo" el fenómeno de la inmigración tras considerar que éste, realizado de forma "legal y ordenada", es "un signo de progreso y de tolerancia". En cuanto a las relaciones entre la Iglesia y el Estado, el presidente ha recordado que España es un Estado aconfesional, por lo que, a pesar de la "buena relación" con la Iglesia católica, "la fe no se legisla" porque "los valores cívicos establecen que no hay ninguna moral ni religión que se pueda imponer en las leyes". Sobre la entrada en vigor de la Ley Antitabaco, Zapatero no ha descartado que, en el futuro, pudiera endurecerse aún más, al tiempo que se ha mostrado satisfecho por el cumplimiento de esta norma.