Batasuna pide contactos a PNV, EA, EB y Aralar para volver a ser declarada legal

Batasuna ha remitido hoy una carta a PNV, EA, EB y Aralar en la que les propone el "inicio de los contactos que fueran necesarios" para resolver de "manera acordada el apartheid político" que, a su juicio, sufre esta formación en las instituciones vascas tras la aprobación de la Ley de Partidos, por la que se la declaró ilegal en 2002. En rueda de prensa desde San Sebastián, los dirigentes de esta formación Pernando Barrena e Imanol Iparragirre han presentado la misiva, en la que esta formación asegura que "nadie debe reparar a la hora de hacer esfuerzos para devolver la palabra al pueblo".

Barrena ha comentado que Batasuna sí ha percibido voluntad de buscar soluciones en este sentido por parte de PNV, EA, EB y Aralar, partidos a los que se dirige esta carta, que aún no ha recibido ninguna respuesta y que está firmada por la Mesa Nacional de la formación ilegalizada. El dirigente de Batasuna ha criticado la Ley de Partidos y ha subrayado que, en su ipinión, se puede "desmantelar en 20 minutos" si los partidos vascos que están en contra de ella así lo desean, al tiempo que ha apuntado que esto puede hacerse además dentro del "plano legal" a través de la aplicación de la Ley Electoral vigente.

Tras denunciar que en los ayuntamientos vascos hay más de 400 cargos políticos ocupados por personas a las que no les corresponden, Barrena ha recordado la "experiencia reciente" de Azkoitia (Guipúzcoa), donde en junio un miembro de una plataforma ilegal tomó posesión como concejal en representación de otra candidatura legal independiente. Para que el representante de la plataforma ilegal pudiera ser nombrado concejal fue necesario que se produjera una vacante entre los electos de la candidatura legal y que todos los integrantes de esta lista renunciaran a ocupar el puesto.

La solución "no depende de Madrid"

En la carta, Batasuna destaca la "situación extrema" que se generó tras la aprobación de la Ley de Partidos y la anulación de las plataformas de la izquierda abertzale que pretendían concurrir a las elecciones municipales y forales de 2003. Asegura que esta formación actuó con "responsabilidad" y pidió a los ciudadanos que apoyaran dichas candidaturas ilegales a pesar de que sus votos serían contabilizados como nulos. Opina que su actitud "no se vio correspondida por todos aquellos partidos que, a pesar de mostrarse contrarios a dicha ley, siguen ocupando cargos públicos" ajenos.

"Somos el único espacio institucional europeo donde las instituciones no son el reflejo de la voluntad popular expresada democráticamente", agrega el escrito, en el que Batasuna recalca que hay que solventar esta situación sin esperar a que la Ley de Partidos pueda ser derogada en el Congreso de los Diputados, ya que la solución "no depende de Madrid".

Algunos de los partidos a los que Batasuna dirige este escrito, como EA y Aralar, han denunciado reiteradamente la campaña de persecución que desarrollan los integrantes de las plataformas ilegalizadas contra sus ediles, lo que ha tenido como consecuencia la dimisión de algunos de ellos, la más reciente la de un concejal de Eusko Alkartasuna en Azpeitia (Guipúzcoa).