Trabajo pondrá en marcha 500.000 inspecciones para supervisar la situación de los extranjeros

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha hecho balance del proceso de regularización de inmigrantes que concluyó el pasado sábado con un total de 690.679 solicitudes presentadas, muy cerca del objetivo marcado por el Gobierno. Caldera, que ha calificado el proceso como "único en los países industrializados", ha insistido en que el objetivo no era "papeles para todos, sino acabar con la economía sumergida".

Jesús Caldera ha insistido en el éxito del proceso de regularización porque el 80% del trabajo ilegal ha aflorado, con lo que esto supone para las arcas del Estado y a su vez como garantía para las pensiones del futuro. Pero el ministro también se ha referido al componente moral del proceso de regularización, ya que ha aflorado una situación que ya existía.

Poner fin a la economía sumergida

Contestando a las críticas vertidas por el Partido Popular, Caldera ha afirmado que este no era un proceso para "dar papeles a todos" sino para acabar con la economía sumergida. En este sentido, ha criticado la actitud del jefe de la oposición y ha señalado que "mientras Rajoy daba papeles, nosotros damos dignidad y trabajo".

Además, el titular de Trabajo también ha contestado al PP que la figura del empadronamiento por omisión fue creada por el propio Rajoy cuando estaba al frente del ministerio. "No me he sacado nada de la manga", ha dicho Caldera, afirmando que la diferencia de este proceso de regularización con los puestos en marcha por el PP, además del consenso con empresarios y sindicatos, es que en este caso se ha exigido un contrato de trabajo por primera vez.

Las cifras

El ministro de Trabajo ha explicado que hasta las nueve de la noche del pasado sábado -cuando finalizó el plazo de las solicitudes- se entregaron en las oficinas de la Seguridad Social 687.138, a las que se sumaron 3.541 presentadas en las delegaciones y Subdelegaciones de Gobierno. Del total de 690.679 solicitudes cursadas ya han sido resueltas el 31%, de las que tan sólo el 3% han sido denegadas.

La mayoría de las solicitudes correspondel al régimen de hogar, seguidas de un 20% del sector de la construcción 20%, la agricultura y por último hostelería y servicios.

500.000 inspecciones de trabajo

Por otro lado, el Ministerio de Trabajo pone en marcha desde hoy y hasta el próximo 31 de diciembre un ambicioso plan para erradicar la economía sumergida y que incluye 500.000 inspecciones de trabajo. En el proceso participarán 1.700 inspectores y subinspectores, que tendrán que realizar unos cien trabajos al año. Esta semana, el ministro presentará el programa al mesa de diálogo de empresarios y sindicatos "para actuar de forma contundente con quien no cumple con la ley".