ERC "reformulará" sus alianzas si PSE y PP pactan tras las elecciones vascas

El presidente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod Rovira mantuvo hoy una entrevista digital con los lectores de ELPAÍS.es y CADENASER.com. El político catalán conversó con los internautas durante más de una hora sobre la política de alianzas de ERC dentro y fuera de Cataluña y los planes de este partido en el conjunto del Estado.

Carod se mostró escéptico ante una posible mayoría PSE-PP en el País Vasco tras las elecciones. "Pero si algo semejante tuviera lugar", dijo, "lógicamente, tendría una reformulación total de nuestra política de alianzas en Madrid". No obstante, comentó que su partido era consciente de la importancia que supone tener "la llave" del Gobierno y se mostró convencido de la importancia de este papel: "(...) nuestro sentimiento es de absoluta responsabilidad política ya que desde los años 30 en plena República no teníamos un rol de este tipo".

En el terreno personal, Carod puso distancia cuando los lectores se refirieron a él como nacionalista -"He sido siempre tan independentista como de izquierdas, tan de izquierdas como independentista"- y lamentó que se le eche en cara su origen no catalán: "En todos los mítines he reivindicado mis orígenes no catalanes y sólo quien quiera acercarse a mí de mala fe o desde la ignorancia puede aún hoy seguir manteniendo semejantes tonterías", dijo al ser preguntado por este asunto.

El político catálán apenas quiso comentar sus negociaciones en secreto con ETA, que provocaron su salida del Ejecutivo catalán, pero se refirió a este episodio como a un "linchamiento" que tuvo "un efecto bumerán" para el partido que entonces gobernaba. "El acoso de hace un año del PP", dijo, "nos hizo pasar de un diputado a ocho, ya que desde la mentira y el insulto no se construye nada".

El líder de ERC destiló grandes dosis de ironía al ser preguntado por su apoyo a la candidatura olímpica de Madrid 2012: "Absolutamente nada en contra [de Madrid 2012], como no tengo nada en contra de que se celebren en otras ciudades (...). Deseo que gane la mejor candidatura".

En otro orden de cosas, aseguró tener una sensación de "acogida y familiaridad" cuando visita el País Vasco y atribuyó a "una imagen totalmente distorsionada" la que puedan tener de él en otras comunidades españolas. "Es posible que nuestro estilo de hacer las cosas pueda parecer radical en ciertos puntos de España (..) Nuestras formas son a veces transgresoras y por eso no son previsibles ni convencionales", afirmó.

Preguntado por la fecha de una hipotética independencia de Cataluña, se mostró tajante: "Se producirá cuando así lo quiera la mayoría de la sociedad catalana y estoy seguro de que ningún demócrata español se opondrá a una decisión tomada democráticamente", concluyó el político catalán