Maragall quiere reducir un tercio la aportación de Cataluña al Estado

El presidente de la Generalitat catalana, Pasqual Maragall, ha apostado hoy por aplicar los principios básicos del sistema de financiación que su Gobierno está preparando para Cataluña en el resto de comunidades autónomas, incluidas las dos, País Vasco y Navarra, que cuentan ahora con un régimen propio. De esta forma, cada territorio ofrecerá a sus ciudadanos "un nivel similar" de servicios con un esfuerzo fiscal "similar". Por lo demás, ha apostado por recortar un tercio la aportación de la comunidad a las arcas del Estado.

El político catalán no ha defendido que estas dos comunidades dejen de disfrutar de lo que ha llamado "su singularidad", pero sí ha abogado porque exista "un principio común aplicable a todos". Maragall advirtió además que los catalanes "no están pidiendo algo que no les toca", y apostó por hacer pública la balanza fiscal de las comunidades para evitar que algunos piensen que "existe gato encerrado". En el caso concreto de Cataluña, el político socialista no quiso concretar la diferencia entre ingresos y aportaciones, aunque apuntó a un desequilibrio de cerca de un billón y medio de pesetas anuales (9.000 millones de euros). Según ha dicho, se conforma con que el Estado renuncie a un tercio de esa cantidad.

A Maragall le disgusta que Cataluña sea la cuarta comunidades autónoma en términos de Producto Interior Bruto antes de impuestos y subvenciones, y la sexta una vez descontados estos. Para evitar esto debe modificarse el sistema de reparto de riqueza entre comunidades, para contentar tanto a los territorios "acostumbrados al subsidio" como a los "irritados por el uso que se hace de su sobreesfuerzo fiscal". "Ofrezco un compromiso de Cataluña con España y reclamo otro tanto del Estado, no para obtener privilegios, sino para poder seguir siendo solidarios", ha dicho Maragall.

Según informa Claudi Pérez, el Gobierno catalán quiere poner topes a la solidaridad del nuevo sistema de financiación autonómica. En su propuesta de Estatuto propondrá crear una Agencia Tributaria propia, que recaude todos los impuestos y luego ceda un porcentaje de esa recaudación al Estado por las competencias no transferidas, amén de realizar una contribución a la solidaridad interterritorial con un tope máximo, a través de un sistema de subvenciones.

El consejero catalán de Economía y Finanzas, Antoni Castells, explicó ayer que el objetivo de la Generalitat es incrementar la participación de Cataluña en los grandes impuestos. Actualmente, la Generalitat recibe el 33% del IRPF recaudado por el Estado en Cataluña; el 33% del IVA, y el 40% de los impuestos especiales. El Ejecutivo catalán trabaja en un nuevo sistema de financiación que, además, reduzca el déficit fiscal de la comunidad, que un grupo de expertos sitúa en el 7,5% del PIB de la comunidad desde 1986.