Peces-Barba pide que no se manipule a las víctimas mientras PP y PSOE se acusan de hacerlo

El Alto Comisionado para la Atención a las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces-Barba, que se reunirá por separado con las asociaciones de víctimas a petición de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), ha subrayado que "la dignidad de las víctimas, su sufrimiento y su recuerdo no pueden ser manipulados", al tiempo que ha llamado a superar las "tensiones" entre los distintos colectivos. Mientras tanto, PP y PSOE se han acusado hoy precisamente de manipular a las víctimas.

El Alto Comisionado ha emitido esta tarde un comunicado en el que considera que la concentración del sábado, convocada por la AVT y en la que se produjeron graves incidentes, tiene "plena legitimidad". Sin embargo, las víctimas "son seres de fines y no pueden ser utilizados como medios, ni como armas arrojadizas contra unos enemigos inventados". Peces-Barba añade que la "buena fe" de sus organizadores ha sido "burlada por interferencias destempladas y aprovechadas que no se deben legitimar". En su opinión, esta manifestación ha puesto de relieve "la posibilidad, convertida en realidad, de manipulaciones políticas e ideológicas". En este punto, se ratifica en su decisión de no asistir a este tipo de actos "cuando no son unitarios".

Manjón exige un cara a cara

Los insultos a miembros del Gobierno, presentes y ausentes, la agresión al ministro José Bono, las peticiones de dimisión del Alto Comisionado y "las referencias inamistosas a otras víctimas ausentes del acto (como Pilar Manjón) se han desarrollado en un clima de odio". "La mayoría de los manifestantes no pudieron dominar la imagen ocupada casi totalmente por la actitud agresiva de esos extremistas", añade el comunicado. Además, señala que también se han puesto de relieve "tensiones e incomunicaciones" entre diversos sectores de las víctimas y de los afectados que el Alto Comisionado había detectado antes y que "son altamente inconvenientes para el buen fin de los objetivos y de la satisfacción de las necesidades que les unen". Por ello, Peces-Barba había considerado la necesidad de convocar reuniones con las asociaciones "en varios momentos y con distinta amplitud".

Así, la Oficina del Alto Comisionado se ha puesto hoy en contacto con los representantes de ambas asociaciones para convocarles a una reunión, que será por separado a petición de la AVT. La entrevista con la AVT será el próximo miércoles por la mañana en una hora y lugar todavía por fijar. El jueves a las 17.30 horas se verá con la Asociación 11-M. Horas antes del anuncio de la fecha de estas reuniones, el presidente de la AVT, José Alcaraz, ha afirmado que "la mayoría" de sus asociados no se sienten representados por Peces-Barba, por lo que ha anunciado que pedirán "casi con seguridad" su dimisión. Aunque la solicitud de la dimisión "está prácticamente decidida, porque todas las llamadas" que están recibiendo son en este sentido, no se confirmará hasta que se reuna la junta, "lo antes posible, el martes o el miércoles".

Por su parte, la portavoz de la Asociación 11-M, Pilar Manjón, se ha mostrado convencida de que habría sido agredida si hubiera acudido a la manifestación. En declaraciones a la Cadena Ser, ha explicado que el sábado se encontraba fuera de España, pero que, de haber estado en Madrid, se habría pensado el acudir, ya que se convirtió en "protagonista" del acto sin estar presente, en alusión a que a los lemas que se corearon en su contra. Respecto a quiénes, Manjón ha opinado: "Se parecen en mucho a aquellos que me dijeron en la puerta del Congreso de los Diputados que 'me metiera mis muertos por el culo'". En cuanto a si se está produciendo una utilización de las víctimas, ha señalado que "hay personas y grupos perfectamente identificables que quieren instrumentalizar política y partidariamente el dolor". Además, ha pedido que la reunión con Peces-Barba sea conjunta para saber "a qué palo de la baraja juega cada uno", al tiempo que se ha desmarcado del anuncio de la AVT de que estudia pedir su dimisión.

Cruce de acusaciones

Mientras, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha reclamado al PP que evite "discursos extremistas que fomentan el enfrentamiento entre los españoles" y que no utilice el dolor de las víctimas "para intentar sacar réditos políticos". "No jaleemos a los violentos", ha subrayado Blanco tras la reunión de la Ejecutiva de su partido. Además, se ha preguntado si los "exaltados tienen relación con algún partido", al tiempo que ha pedido la cooperación de la AVT para identificar a los agresores. Para el PSOE, estos actos "no fueron casuales" sino "una forma cultivada de violencia". Por su parte, el secretario general popular del PP, Ángel Acebes, se ha dirigido a los socialistas tras el Comité de Dirección de su partido, a los que ha recordado que el PP condenó las agresiones "desde el primer momento". "Nosotros no les hemos devuelto el silencio con el que los socialistas reaccionaron en las ocasiones en que el PP era víctima de ataques de radicales", ha señalado en referencia a los insultos lanzados contra miembros del PP, entre ellos Rodrigo Rato, durante la manifestación que tuvo lugar en Barcelona tras el 11-M.

También ha exigido al PSOE que deje de confundir a la sociedad "extendiendo a miles de personas el comportamiento reprochable de un grupo" y con mensajes con los que intenta sacar rédito político, "haciendo ver que el PP siempre es el culpable". El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, ha afirmado que vio "con preocupación el resurgir de la extrema derecha en España". Sevilla, que fue el representante del Ejecutivo en la marcha, ha asegurado: "Hacía muchos años que no se veía a tanta gente lanzando gritos tan de extrema derecha". La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Ana María Vidal Abarca, ha tildado de "reventadores" a los agresores y ha hecho un llamamiento para que "los ciudadanos normales, los que respetamos a los demás, hagamos algo para que estas cosas no vuelvan a pasar".