El Gobierno y el PP se enfrentan en el Congreso por el papel de Aznar en el golpe de Venezuela

La sombra de la polémica sobre las acusaciones del ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, al Gobierno del Partido Popular por apoyar el golpe de Estado de 2002 en Venezuela ha levantado hoy gresca y reproches mutuos entre el Gobierno y el principal grupo de la oposición en el Congreso. Sin embargo, el Ejecutivo se ha negado a aclarar el tema, después de que ayer Zapatero remitiera a las explicaciones que Moratinos dará en el Congreso.

Zapatero anunció ayer durante la rueda de prensa posterior a su encuentro con el presidente venezolano, Hugo Chávez, que Moratinos explicará en la Comisión de Exteriores del Parlamento las declaraciones en las que acusó al Gobierno de José María Aznar de haber apoyado el golpe de Estado de 2002 en el país sudamericano. Chávez ratificó ayer la afirmación del ministro de Exteriores español. Moratinos afirmó el lunes por la noche en el programa de TVE 59 segundos: "Con el anterior Gobierno del PP, cosa inédita en la diplomacia española, el embajador español recibió instrucciones de apoyar el golpe". Chávez señaló ayer: "Desde el punto de vista de Venezuela, no tengo dudas de que fue cierto". Luego añadió que "el embajador acudió raudo y veloz" al encuentro con el jefe de los golpista, el empresario Pedro Carmona, actualmente huido de la justicia de su país.

"Lamentable espectáculo"

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha aprovechado hoy la sesión de control al Gobierno en el Parlamento para referirse a lo que ha calificado como "lamentable espectáculo protagonizado por Chávez y Moratinos", pues en su opinión "lo que hoy espera la opinión pública es una explicación". Pero en lugar de realizar una pregunta directa, ha pasado de la alusión a otro tema: la supuesta intención del Ejecutivo de suprimir las desgravaciones para los planes de pensiones. El presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero ha aprovechado para eludir la cuestión y se ha ceñido a la pregunta de Rajoy, lo que ha provocado fuertes exclamaciones de protesta en las filas de los diputados del Partido Popular que el presidente del Congreso, Manuel Marín, ha tenido que acallar.

"Usted lo ha querido así"

Rajoy ha recogido el guante del silencio y ha replicado: "Usted lo ha querido así. Espero que no haga una gracia cuando ya no pueda replicar". Luego ha incidido de nuevo en el tema de las desgravaciones, que Zapatero ha procedido a aclarar en mayor grado. Pero al final de su intervención, el presidente del Gobierno ha añadido: "Y no quiero defraudarle, ya que ha hecho referencia en dos ocasiones al debate de las últimas horas"... Los diputados del Partido Popular ha prorrumpido entonces en gritos y protestas, previendo que se iba a referir al tema de la jornada. Sin embargo, Zapatero sólo ha pasado de refilón: "Estos días ha habido muchas criticas al Gobierno y al ministro de Exteriores, pero no nos molesta nada como nos trata el Grupo Popular después de ver como se tratan ustedes mismos, por ejemplo en Elche". Las filas socialistas ha recogido con fuertes aplausos la alusión de su líder a la pelea a puñetazos hace unos días de seguidores del presidente del PP en Valencia, Francisco Camps, con otros del ex presidente en esa comunidad y actual portavoz parlamentario del partido conservador, Eduardo Zaplana.

El atuendo de Acebes

La réplica le ha correspondido al secretario general del PP, Ángel Acebes, que ha preguntado a la vicepresidenta del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega: "Después de la ocurrencia de pésimo gusto del presidente del Gobierno, ¿considera que la nación española es un concepto discutible o discutido". A partir de ahí las réplicas y contrarréplicas entre el Gobierno y el Partido Popular han tenido como fondo las alusiones veladas —por parte del PP, a las declaraciones de Moratinos, y por parte del PSOE a Elche— y los insultos y descalificaciones. Fernández de la Vega ha respondido a Acebes que "lecciones de gusto no puede dar", y éste le ha respondido: "Es verdad señoría, yo no soy un especialista en revistas de moda como usted". La vicepresidenta ha terminado luego su intervención: "Debería modernizarse en su manera de ser, en sus ideas y en sus atuendos", lo que ha provocado nuevos gritos en las filas populares, que han hecho intervenir a Marín: "Así no se puede continuar si no hay un mínimo de respeto entre todos". En su última intervención, Zaplana ha pedido al Gobierno una rectificación por las palabras de Moratinos y el cese de éste. Fernández de la Vega ha eludido pronunciarse directamente y ha concluido con una nueva alusión a los sucesos de Elche.