El Gobierno cambia la cúpula militar por proteger a las Fuerzas Armadas del escándalo del Yak-42

El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el relevo de los tres miembros de la cúpula militar que ya lo eran cuando se produjo el accidente del Yak-42. Los cambios han afectado al jefe del Estado Mayor de la Defensa, almirante Antonio Moreno Barberá, y a los jefes de los ejércitos de Tierra y Aire, Luis Alejandre y Eduardo González Gallarza. Aunque tal remodelación estaba prevista para otoño, el ministro de Defensa, José Bono, ha decidido adelantarla para preservar a las Fuerzas Armadas del escándalo provocado por los errores en la identificación de los cadáveres del Yak-42.

Tras la reunión del Consejo de Ministros, Bono ha negado sin embargo la relación entre un asunto y otro: "No deseo establecer ninguna relación directa entre el accidente y el relevo, la decisión no supone exigencia de responsabilidad alguna por el caso del Yakolev". Y para explicar que justo hoy se hayan hecho públicos los informes sobre los errores de identificación de las víctimas del accidente, ha añadido: "No puede atribuirse intencionalidad distinta de la de una coincidencia". En cualquier caso, el Gobierno ha solicitado su comparecencia en el Congreso para contribuir a la "verdad" y a la "transparencia" en este asunto.

Reunión antes del relevo

El Ejecutivo ha nombrado al teniente general Félix Sanz Roldán, actual director general de Política de Defensa, como nuevo jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD). Los también tenientes generales José Antonio García González y Francisco José García de la Vega son los nuevos jefes del Estado Mayor de Tierra (JEME) y del Estado Mayor del Aire (JEMA), respectivamente.

Antes de la reunión del Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, José Bono se ha reunido con los Consejos Superiores del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire, órganos consultivos formados por una quincena de generales en cada caso, que prácticamente sólo se convocan para emitir su opinión cuando hay un nombramiento de un nuevo jefe del Estado Mayor.

"Un viaje a Cancún"

Con los nombramientos hoy de los nuevos jefes del Estado Mayor de la Defensa, del Ejército de Tierra y del Aire se renueva toda la cúpula de las Fuerzas Armadas tras la llegada al Gobierno del PSOE, ya que recientemente se produjo el relevo en la Armada, cuyo máximo responsable, Francisco Torrente, fue sustituido el pasado 30 de abril por el almirante Sebastián Zaragoza.

El también almirante Antonio Moreno Barberá fue nombrado jefe del Estado Mayor de la Defensa en el año 2000 y su relevo estaba ya previsto. En cuanto al Ejército del Aire, González Gallarza accedió al cargo en 2001 y su relevo también era previsible. En cambio, el caso más significativo es el de Luis Alejandre, que ha permanecido sólo un año y medio como jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra.

Alejandre provocó la indignación de las familias de los fallecidos en el Yak-42 con dos comentarios muy desafortunados. Primero dijo que "el Ejército no organiza viajes de novios a Cancún", menospreciando las quejas por las condiciones de transporte, y luego declaró que quienes protestaban no eran familiares directos de los fallecidos, cuando se trataba casi siempre de padres, viudas o hermanos.