'Caceroladas' y apagones contra la guerra

Madrid. Las cacerolas y otros instrumentos de percusión se dejaron sentir en los edificios de las principales calles y plazas del centro de Madrid y en el extrarradio, donde los vecinos desde las ventanas aporrearon objetos metálicos, en una sonora manifestación.

Barcelona. Miles de barceloneses se sumaron a la 'cacerolada' que por segundo día consecutivo convocó la plataforma Aturem la Guerra, que agrupa a más de 250 ONG, entidades, partidos y sindicatos que se oponen a la invasión de Irak, en una manifestación masiva cuyo estruendo se pudo escuchar en toda la ciudad.

Granada. La iluminación exterior de la Alhambra de Granada también se apagó a partir de las diez de la noche y el palacio nazarí quedó a oscuras durante quince minutos para mostrar con esta iniciativa, convocada por la organización Ecologistas en Acción en toda España, el rechazo a los enfrentamientos bélicos en Irak.

Cáceres. Otras 500 personas se concentraron anoche junto al Quiosco de la Música del Paseo de Cánovas, en Cáceres, en una "cacerolada" y una pitada en contra de la guerra, convocada por el Foro Social "Otro mundo es posible".

Cantabria. En Astillero, unos 200 manifestantes, según estimaciones de la Policía Local, recorrieron varias calles del municipio convocados por el Colectivo contra la guerra de Astillero-Guarnizo, en una marcha acompañada por antorchas y ruidos de cacerolas, que recorrió sin incidentes varias calles del centro urbano.

Murcia. En Murcia unas 150 personas, según la Policía Local, y más de 300 personas, según los organizadores, se concentraron frente al Ayuntamiento de Murcia para participar en otra cacerolada, a la que se sumará por la noche un apagón.

Asturias. En Mieres, el Ayuntamiento apagó por un cuarto de hora las luces de sus enclaves céntricos y parte del alumbrado de la vía pública, por decisión de su alcalde, Misael Fernández Porrón, que ha querido así sumarse a las movilizaciones.