Trabajadores de 36 países europeos realizan un paro de 15 minutos a mediodía contra la guerra
Cinco millones de trabajadores han secundado la protesta en España, según las cifras ofrecidas por UGT y CC OO
Los más de 16,3 millones de personas que trabajan en España estaban convocados a participar a mediodía en un paro de 15 minutos, promovido por los sindicatos, con el lema Paremos Europa para parar la guerra, al que seguirá mañana una ola de manifestaciones por toda España.
El seguimiento en las empresas españolas, según los sindicatos CC OO y UGT, ha sido de más de cinco millones de trabajadores. El mayor apoyo se ha producido en las grandes centros como Michelín, Iveco Pegaso, las factorías de cerámica de Castellón, las de calzado de Alicante, Unión Fenosa, Ford o Izar-Ferrol, mientras que en las pymes y pequeños comercios la incidencia ha sido "desigual", según los convocantes. La patronal CEOE, que hace unos días criticó el uso del derecho de huelga para fines no laborales, ha eludido dar cifras de seguimiento.
El paro simbólico, al que se han sumado los trabajadores de este diario, ha sido convocado por la Confederación Europea de Sindicatos (CES), que cuenta con 64 millones de afiliados en 36 países europeos. En España ha sido secundado por UGT y CC OO, así como por la Unión Sindical Obrera (USO) y diversas organizaciones sociales y culturales. Los partidos de la oposición, con PSOE e IU al frente, también han hecho un llamamiento a sus militantes para que secundaran el paro. Así, José Luis Rodríguez Zapatero ha encabezado la protesta en la sede de Ferraz. Mientras, varias decenas de personas se manifestaban frente a la sede del PP, pero fuentes del partido han aclarado que no son miembros de su plantilla de trabajadores.
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha destacado momentos antes de sumarse al "paro preventivo" en Zaragoza junto al candidato socialista a la alcaldía, Juan Alberto Belloch, que es un "acontecimiento histórico", ya que es la primera vez que la CES lleva a cabo una acción en todo el continente.
Garzón, a las puertas de la Audiencia
Al término del paro, se han leído manifiestos por la paz a la puerta de las empresas. En Madrid, varios cientos de personas se han concentrado en la Puerta del Sol con pegatinas de No a la guerra, entre ellos los candidatos del PSOE Trinidad Jiménez y Rafael Simancas. Baltasar Garzón paraba al mismo tiempo junto a una veintena de funcionarios de la Audiencia a la puerta de los juzgados. Otras 500 personas se concentraban a las puertas del Congreso. En Barcelona, la protesta ha sido generalizada: transportes, instituciones y trabajadores de las grandes empresas. En Sevilla, al frente del paro estaba el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín y el presidente de la comunidad, Manuel Chávez, ha asistido al acto en Granada. En Valladolid, las cadenas de producción de Renault también han parado.
Este paro forma parte de las movilizaciones convocadas por distintas organizaciones en favor de la paz, que arrancaron ayer con manifestaciones de estudiantes en las principales capitales de provincia y que culminarán mañana sábado con manifestaciones en todas las capitales de provincia en contra de la guerra en Irak, con el lema La paz es posible, convocadas por CC OO, UGT, PSOE, IU y la plataforma Cultura contra la Guerra. La manifestación de Madrid, para la que Renfe y el metro reforzarán su oferta de transporte, saldrá de Atocha a las 18.00 horas y concluirá a las 21.00 horas en la Puerta del Sol con la lectura de un escrito de José Saramago, en la que participará también la escritora Dulce Chacón.
Madrid no reforzará el servicio de autobuses para la manifestación contra la guerra
La Empresa Municipal de Transportes no reforzará su flota de autobuses en Madrid con motivo de la manifestación contra la guerra en Irak que se celebrará este sábado. El alcalde de la capital, José María Alvarez del Manzano ha justificado su decisión porque espera que la convocatoria de mañana tenga menos participación que "en otras ocasiones".
Álvarez del Manzano ha solicitado a las personas que mañana salgan a la calle a manifestarse que cuiden las zonas verdes y el mobiliario urbano de la capital. "Luego se enfadan cuando digo lo que cuesta, y tengo que recordar que cuesta mucho dinero a los madrileños, y que el Ayuntamiento paga en nombre de ellos si la manifestación discurre por encima de las zonas verdes o alteran el mobiliario urbano", ha asegurado el alcalde, que ha dejado claro que no acudirá a la convocatoria.
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