El dinero decomisado a los 'narcos' se usará para rehabilitar a los drogadictos condenados
La venta de estupefacientes en centros educativos se considerará un agravante
El ministro de Justicia, José María Michavila, ha adelantado hoy nuevos extremos del proyecto de reforma del Código Penal que aprobará mañana el Gobierno, según informa Pilar Marcos. Como novedades, el Ejecutivo pretende endurecer las penas a los integrantes de redes de tráfico de drogas y permitir que los drogadictos condenados a penas menores eludan la prisión y se sometan a un proceso de rehabilitación. La financiación de la desintoxicación se obtendrá precisamente con el dinero decomisado a los narcos.
La redención de la pena a los drogadictos se limitará a un periodo de cinco años, prorrogable a siete, y dependerá del criterio del juez. Además, "si esa persona no es responsable y no sigue el plan de tratamiento volverá a ingresar en prisión", según ha explicado Michavila. Para la suspensión de las condenas de se modificarán los artículos 85, 87 y 130 del actual Código.
El Ejecutivo pretende también incluir nuevos agravantes en el delito de tráfico de drogas, como la venta de estupefacientes en centros educativos. Además el juez podrá anular los contratos lícitos firmados por los narcotraficantes con empresas tapadera para decomisar las ganancias obtenidas por éstos y destinarlas a un fondo dedicado a generar los citados planes de desintoxicación, que gestionará el Plan Nacional sobre Drogas. Según Michavila, este último sistema ha sido utilizado con éxito en la legislación alemana.
La figura del arrepentido
En el desarrollo de estos planes colaboraran los ministerios de Justicia, Interior y Sanidad y Asuntos Sociales, Instituciones Penitenciarias, la Delegación del Plan contra la Droga, junto al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Otra novedad será la potenciación de la figura del arrepentido que colabora con la justicia, y que regula actualmente el artículo 376 del Código Penal. El Gobierno pretende que los narcos puedan beneficiarse de la reinserción si inculpan a otros implicados en el negocio de la droga pero ya no será necesario que los arrepentidos se autoinculpen.
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