Arenas "no insistirá más" en convocar al 'lehendakari' para abordar los traspasos

Javier Arenas no volverá a pedir al lehendakari Juan José Ibarretxe la celebración de un encuentro para reconducir las relaciones entre Gobierno central y vasco y para negociar los traspasos pendientes al País Vasco. El ministro de Administraciones Públicas ha sido claro: "no insistirá más" en su invitación pese a que sigue estando dispuesto a dialogar con Ibarretxe.

Las distintas cartas que se han cruzado Ibarretxe y Arenas en los últimos días se producen después de que el Gobierno vasco lanzase un ultimátum, avalado por el Parlamento de Vitoria, para que el traspaso a Euskadi de las 37 competencias pendientes se produzca antes de dos meses. De no producirse estos traspasos, Ibarretxe asegura que podría tomarse las competencias por su cuenta.

Arenas ha aseverado hoy que "queda claro quien quiere dialogar y quien no quiere y eso es algo que le compete a Ibarretxe, puesto que es su responsabilidad", y ha afirmado no entender "que a alguien le siente mal que yo diga que quiero hablar con todos los presidentes de las comunidades autónomas".

Arenas ha insistido en que no encuentra motivos para disculparse de estas afirmaciones realizadas en el momento de ser nombrado ministro de Administraciones Públicas, y ha indicado que ya ha tenido conversaciones con todos los presidentes de las comunidades autónomas.

La respuesta del Ejecutivo vasco

Desde la portavocía de la presidencia vasca se ha contestado que "lecciones de diálogo, el señor Arenas y el Gobierno del señor Aznar son los menos indicados para darlas" y se ha añadido que "haría bien el señor ministro en no disculparse de aquello que nadie le ha pedido que se disculpe".

"Nos parece estupendo que diga que quiere reunirse con todos los presidentes de las comunidades autónomas, eso no molesta a nadie", han agregado las mismas fuentes.

En cambio, han recordado al ministro que se le ha planteado "si sigue pensando que el terrorismo se ha trasladado a las instituciones vascas, como también dijo tras su toma de posesión" y si su intención "es continuar la política de su antecesor y, por tanto, considerar que el cumplimiento íntegro del Estatuto de Guernica, refrendado democráticamente por todos los vascos hace 23 años, es inconstitucional".