_
_
_
_

Lluvia de millones en el parqué: las empresas españolas cotizadas baten su récord de beneficios

Las compañías ganaron 73.112 millones el pasado año, un 20,8% más, y encaran 2025 con optimismo

Paneles con las cotizaciones en la Bolsa de Madrid.
Paneles con las cotizaciones en la Bolsa de Madrid.Vega Alonso (EFE)
David Fernández

La cosecha de resultados empresariales de la temporada 2024 fue excepcional. El viernes finalizó el plazo que tienen las compañías españolas cotizadas para presentar sus cuentas anuales a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y los datos muestran una gran resiliencia en un año que en un principio se presumía lleno de incertidumbres (inflación, tipos de interés, ruido geopolítico) que poco a poco se fueron disipando.

En concreto, los grupos con presencia en Bolsa que facilitaron sus datos al supervisor bursátil ganaron de forma conjunta 73.112 millones de euros en 2024, cantidad que supone una mejoría del 20,87% con respecto a 2023. El crecimiento del beneficio fue generalizado, con independencia del tamaño de las empresas. De hecho, las grandes corporaciones, es decir, aquellas incluidas en el Ibex 35, obtuvieron ganancias agregadas por valor de 62.932 millones, un 23,6% más. En el caso del resto de cotizadas incluidas en el Índice General de la Bolsa de Madrid, el resultado neto se elevó un 6,31%, totalizando 10.180 millones.

Los ingresos son un factor clave para evaluar la calidad de las cuentas de resultados porque hablan de la capacidad de generar negocio de las empresas incluso en entornos de incertidumbre como el actual. En este sentido, la facturación de las compañías españolas con presencia en Bolsa dio la talla. En concreto, las 102 empresas analizadas generaron ventas por valor de 847.311 millones de euros, lo que supone una mejora del 4,17% sobre 2023. En el caso del Ibex 35, la cifra de negocio mejoró un 3,56%, situándose en 666.628 millones, mientras que en el resto del mercado continuo los ingresos subieron un 6,5%, hasta los 180.682 millones.

La mejoría de la facturación fue generalizada en todas las divisiones, pero una vez más fueron los negocios exteriores los que apuntalaron el crecimiento de las cuentas. En el caso del Ibex 35 (sin contar a ArcelorMittal y a Inditex), los ingresos logrados en el mercado español sumaron 193.657 millones de euros, solo un 0,24% más que en 2023. En cambio, las ventas internacionales mejoraron un 7,3%, hasta situarse en 373.641 millones. Este diferencial en el crecimiento por áreas geográficas ha provocado que el peso de las actividades exteriores cada vez sea mayor (un 65,5% sobre el total en 2024) en la cuenta de resultados de las grandes cotizadas.

Tirón operativo

El control de costes es esencial para impedir que los gastos se coman buena parte de la mejora de los ingresos. Y eso es lo que, en líneas generales, lograron la mayor parte de las compañías cotizadas. Junto a la solidez de la facturación, el otro apunte de las cuentas de resultados que confirma la fortaleza de las cifras corporativas en el resultado de explotación. Esta partida viene a destilar el jugo más puro de los resultados al descontar a las ventas los gastos corrientes (sin contabilizar impuestos, intereses o amortizaciones). En 2024, el resultado de explotación conjunto de los grupos cotizados fue de 110.865 millones de euros, un 15,02% superior al logrado un año antes. Es decir, el control de los gastos permite que mejoras, aunque sean modestas, en los ingresos supongan aumentos mayores en el resultado de explotación. Es lo que se conoce como apalancamiento operativo y las empresas españolas siguen dando muestras de él.

El gran motor de las cuentas corporativas el pasado año fue el sector bancario. A pesar de las bajadas de los tipos de interés aplicadas por los bancos centrales una vez que la inflación empezó a dar muestras de estar bajo control, las entidades han seguido aprovechando el diferencial existente entre lo que pagan por captar dinero y lo que cobran por prestarlo. Además, el crecimiento económico ha contribuido a impulsar su actividad crediticia y la venta de productos financieros. En este contexto, los seis grandes bancos cotizados (Banco Santander, BBVA, Caixabank, Banco Sabadell, Bankinter y Unicaja) ganaron 31.768 millones de euros en 2024, un 20,54% más. Estas ganancias han venido acompañadas de anuncios de subidas importantes en la retribución a sus accionistas, bien mediante el reparto del dividendo, bien mediante la recompra de acciones.

Oficina de Banco Santander en Manhattan, Nueva York.
Oficina de Banco Santander en Manhattan, Nueva York.Beata Zawrzel (NurPhoto / Getty Images)

El Banco Santander fue la compañía española cotizada que más dinero ganó el pasado ejercicio. La entidad pulverizó su marca con un beneficio de 12.574 millones de euros, un 13,53% mayor al logrado en 2023 gracias al buen comportamiento de tres de sus principales mercados (España, Brasil y México). “Hemos logrado resultados récord por tercer año consecutivo con crecimiento de los ingresos, la rentabilidad y la remuneración al accionista”, destacó su presidenta durante la presentación de las cuentas. Además, Ana Botín se mostró confiada en mantener el ritmo este curso: “En 2025 esperamos aumentar los beneficios y la rentabilidad con ingresos estables y menores costes”.

El gran rival bancario del Santander, BBVA, también tiene motivos para sacar pecho. Aunque en 2024 todas las miradas estuvieron puestas en su opa sobre el Sabadell, el negocio recurrente de la entidad mostró gran fortaleza. En concreto, el beneficio neto alcanzó 10.054 millones de euros, un 25,38% más. Los dos mercados que mejor comportamiento tuvieron fueron España y México. Este último ya aporta más del 50% de las ganancias totales del BBVA. “Fue un año extraordinario. Superamos por primera vez los 10.000 millones de beneficio. Encaramos 2025 con optimismo y con buenas perspectivas de crecimiento a pesar de las incertidumbres y los retos a los que se enfrenta el sector financiero europeo”, destacó Carlos Torres, presidente del grupo, en un vídeo grabado con motivo de la presentación de las cuentas.

En el otro sector dominante de la Bolsa española, el energético, la marcha de los resultados no fue homogénea. Iberdrola, por ejemplo, elevó sus ganancias un 16,85%, situándolas en 5.611 millones de euros. En la presentación a analistas su presidente, Ignacio Sánchez Galán, se mostró convencido de que las medidas comerciales y legislativas de la nueva Administración estadounidense “no tendrán prácticamente ningún impacto” en el negocio de la compañía. El ejecutivo avanzó que el crecimiento del beneficio de Iberdrola en 2025 estará próximo al 10%, con una cifra muy por encima de los 5.400 millones previstos en su plan estratégico.

Cara y cruz

Las cuentas de Endesa también destacaron —se apuntó un resultado neto de 1.888 millones con una mejora del 154%—, aunque tienen letra pequeña. La eléctrica controlada por el conglomerado italiano Enel se benefició al comparar los resultados con los obtenidos de 2023, un ejercicio en el que sufrió el impacto de varios resultados extraordinarios como el laudo que perdió contra QatarEnergy y por el que tuvo que pagar 530 millones por un contrato de gas. El consejero delegado de Endesa, José Bogas, aprovechó la presentación de las cuentas para lanzar un recado al Gobierno: “El grupo reitera su capacidad financiera para aumentar y acelerar su plan de inversiones en transiciones energéticas si el entorno regulatorio lo respalda”.

En el caso de Repsol, su beneficio sufrió un retroceso del 44,5%, situándose en 1.756 millones de euros. La petrolera justificó este paso atrás de las cuentas por los menores precios del crudo, el gas, la electricidad y los moderados márgenes de refino. El consejero delegado, Josu Jon Imaz, destacó que la compañía está cumpliendo la hoja de ruta de su plan estratégico, que pasa por su apuesta por la transición energética, y que eso le permite incrementar el dividendo y las inversiones. “En 2025 seguiremos esta misma senda, cumpliendo con nuestros compromisos de retribución al accionista y manteniendo nuestra fortaleza financiera para invertir y crecer de forma rentable”.

Los peores resultados dentro del sector energético, en cambio, correspondieron a Enagás. El gestor del sistema gasista español se anotó unas pérdidas de 299 millones, frente a los beneficios de 342 millones logrados en 2023. Los números rojos se debieron a las minusvalías de casi 610 millones registradas por la venta de su participación del 30,2% en la estadounidense Tallgrass Energy (363,71 millones de euros) y al impacto del laudo arbitral por el conflicto con Perú por el proyecto Gasoducto Sur Peruano.

Fuera de los sectores bancario y energético, el mercado esperaba con cierto morbo las cuentas de Telefónica. El nuevo presidente, Marc Murtra, presentó las cifras de 2024, que son atribuibles al 100% a su predecesor, José María Álvarez-Pallete. La puesta de largo del expresidente de Indra en la operadora ha sido agridulce pues lo ha hecho con unas pérdidas de 48,99 millones de euros. Es el segundo ejercicio consecutivo de números rojos para el grupo, en ambos casos por el impacto de apuntes contables extraordinarios. Si en 2023 (ejercicio en el que perdió 891 millones) se debió al deterioro de su negocio en el Reino Unido, en 2024 la explicación del mal resultado hay que buscarla en la actualización del valor de sus activos, especialmente en Hispanoamérica, en el último trimestre de 2024. Sin los atípicos, Telefónica hubiera ganado 2.304 millones de euros, por lo que Murtra prefirió destacar en la valoración de las cuentas la marcha ordinaria del negocio: “Hemos cumplido con nuestros objetivos financieros mientras seguimos reforzando nuestra posición competitiva. Mantenemos el impulso en nuestros mercados clave con una sólida generación de caja de 2.600 millones de euros”.

España batió su récord turístico en 2024 con la llegada de 94 millones de visitantes. Esta gran actividad ha espoleado las cuentas de las empresas del sector. Meliá, por ejemplo, ganó 140,6 millones, un 19,44% más, IAG elevó las ganancias hasta los 2.734 millones, un 3% más, mientras que Amadeus se anotó un beneficio de 1.253 millones, un 12,1% más. “Hemos culminado la disrupción de la pandemia, superando incluso los ingresos de 2019″, destacó Gabriel Escarrer, presidente de Meliá.

La presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín, durante la presentación de los resultados de Banco Santander el 5 de febrero.
La presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín, durante la presentación de los resultados de Banco Santander el 5 de febrero.Álvaro García

Los consejeros ganan 301 millones

Los miembros de los consejos de administración de las empresas del Ibex 35 tuvieron una remuneración agregada de 301 millones de euros en 2024. Esta cifra supone un descenso del 7,85% con respecto a la retribución que cobraron en 2023. Este retroceso no se debe a una estrategia deliberada por parte de las compañías de apretar el cinturón a sus administradores, sino que está motivada por el impacto de determinados cobros extraordinarios (bonus e indemnizaciones, básicamente) que tuvieron lugar en 2023. Por ejemplo, Puig, en el año previo a su estreno en Bolsa, rompió la hucha para remunerar “de forma extraordinaria” a su presidente, Marc Puig, con un sueldo total de 26 millones. En 2024 el salario del primer ejecutivo del grupo de perfumes no estuvo mal (12,7 millones), pero no pudo igualar el superbonus del ejercicio anterior. También contribuyeron a la caída de la retribución agregada del Ibex los blindajes de oro que pagaron compañías como Cellnex e Indra a sus antiguos consejeros ejecutivos en 2023.

El Banco Santander fue la compañía que más dinero destinó a retribuir a su consejo de administración: 30,21 millones, un 5,7% más. La presidenta de la entidad, Ana Patricia Botín, se embolsó por todos los conceptos 13,77 millones. En su último año al frente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete recibió un total de 9,64 millones, a los que hay que añadir la indemnización de 23,5 millones pactada tras su salida de la presidencia.

El impacto de los cobros extraordinarios también se dejó notar en el siguiente nivel del escalafón salarial de las compañías: el formado por los miembros de la alta dirección (sin contar a los consejeros ejecutivos). Los altos directivos de las compañías del Ibex 35 percibieron el año pasado una masa salarial agregada de 353 millones. Esta cifra representa un retroceso del 16,04% sobre los datos de 2023. El Banco Santander también es el que más dinero destina a pagar a sus directivos con un total de 49,53 millones, un 1,2% menos que en 2023.

Crece la deuda y el número de empleados

La fuerte generación de caja lograda por las compañías cotizadas el pasado año les ha permitido mejorar su política de retribución al accionista y, al mismo tiempo, reforzar sus inversiones para seguir creciendo. Esta estrategia, que en algunos casos ha implicado la compra de rivales directos en el sector, ha tenido como consecuencia un repunte de la deuda financiera neta. A 31 de diciembre pasado los compromisos de las compañías industriales (sin incluir bancos) del Ibex 35 sumaban 175.679 millones de euros, cantidad que representa un incremento del 3,06% con respecto a un año antes.

El incremento del pasivo de las corporaciones llega en un momento de descenso de los tipos de interés, tanto en EE UU como en Europa, lo que alivia un poco la carga financiera para los balances. La compañía del Ibex que más aumentó su endeudamiento, un 228%, el pasado año fue Acerinox. Esta situación se explica por la compra de Haynes International (841 millones de euros) y el pago de la deuda de Bahru Stainless previo a su venta (60 millones). También es significativo el aumento de la deuda de Repsol, que pasa de 2.096 millones a 5.008 millones, un 138% más. En términos absolutos, la compañía con más deuda neta del Ibex 35 es Iberdrola con 52.600 millones de euros, un 10% más que en 2023. A la eléctrica le sigue Telefónica con un pasivo de 27.161 millones.

La bonanza económica de las grandes empresas cotizadas también les permite contratar a más gente. Al cierre del pasado ejercicio, el número de trabajadores en las empresas del Ibex 35 era de 1,071 millones de personas. Esta fuerza laboral supone un incremento del 3,28% con respecto a la de un año antes. Los hombres representan el 55,19% de las plantillas y las mujeres el 44,81%. Banco Santander es la empresa española cotizada que más gente emplea, con casi 210.000 trabajadores. Le sigue Inditex (datos al cierre de su primer semestre fiscal), con 153.541 empleados; ACS (134.321), BBVA (123.600) y Telefónica (101.384). 

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

David Fernández
Es el jefe de sección de Negocios. Es licenciado en Ciencias de la Información y tiene un máster en periodismo por EL PAÍS-UAM. Inició su carrera en Cinco Días y desde 2006 trabaja en EL PAÍS, donde se ha especializado en temas financieros. Ha ganado los premios de periodismo económico de la CNMV, Citigroup, Aecoc y APD.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_