Renfe prevé contar con la flota más moderna de Europa en 2026 con la fabricación de 436 trenes

Renfe prevé contar con el parque ferroviario más moderno de Europa en 2026, una vez haya recibido una buena parte de los 436 nuevos trenes y 50 nuevas locomotoras que ya están en proceso de fabricación. La mayoría de las futuras unidades, además de 57 trenes remodelados, prestarán servicio público en Cercanías (Rodalies, en Barcelona y Valencia) y casi un centenar serán convoyes de media distancia, según fuentes de la empresa pública. Para los recorridos comerciales de larga distancia (AVE y Avlo), Renfe espera contar este mismo año con 30 nuevos trenes de alta velocidad.

Las previsiones apuntan a que en 2025 Renfe empezará a recibir una docena de nuevos trenes y locomotoras al mes de los distintos adjudicatarios de los concursos de renovación de la flota que empezaron a convocarse en 2016, si bien la parte mollar de las contrataciones fue en 2021. El total de la inversión se eleva a 4.509 millones de euros, que se incrementa a 5.500 millones con la inclusión del presupuesto para el mantenimiento de los trenes.

De este modo, la empresa calcula que en 2026 se producirá un fenómeno similar al que ya se detectó en 2009, cuando España contó con el parque ferroviario más moderno de Europa. El grueso de la nueva flota (los de Cercanías, Rodalies y Media Distancia) empezará a rodar a principios de 2025. Entre ese año y el siguiente, está prevista la introducción de 316 trenes de Cercanías de gran capacidad (con coches de dos pisos) y 94 trenes de Media Distancia.

Todo el proceso de fabricación se realiza en plantas españolas y generará 52.000 empleos directos e indirectos, siempre según las estimaciones de la empresa. Las principales fábricas de las principales multinacionales adjudicatarias, Alstom, Talgo, CAF y Stadler se sitúan en Catalunya, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana.

Precisamente, el presidente de Renfe, Raül Blanco, visitó este miércoles la fábrica de la suiza Stadler, ubicada en la población de Albuixech, a 12 kilómetros de Valencia, para conocer el diseño de las primeras unidades de los 79 trenes encargados con una inversión total de 1.305 millones, incluyendo el mantenimiento de parte de los vehículos durante 15 años. Esta carga de trabajo comportó para Stadler Valencia la ampliación de su plantilla de Albuixech en 500 nuevos trabajadores.

Estas unidades forman parte del mayor contrato de la historia de Renfe por un valor inicial de 2.445 millones de euros, que finalmente se ha aumentado hasta casi los 3.000 millones con el incremento de las demandas de trenes para Cercanías. Este concurso fue adjudicado en 2021 a la francesa Alstom, con fábrica en Santa Perpètua (Barcelona), y a Stadler.

En principio, ambos operadores tenían que suministrar 211 unidades de Cercanías para paliar principalmente las carencias de Madrid y Barcelona. Antes de la ampliación del contrato, Alstom se encargaba de 52 trenes de 100 metros de longitud por 1.447 millones de euros y Stadler, de 24 de la misma longitud y otros 35 de 200 metros, por un importe de 998 millones.

Actualmente, la firma suiza está fabricando las dos primeras unidades del pedido en una nueva nave. El proceso de validación y certificación comenzará en 2024. Una vez superado, se iniciará la producción en serie de las 77 unidades restantes, entregando a Renfe dos trenes cada mes, según el operador.

Blanco explicó que el tren de Cercanías más grande de Stadler, de doble piso, tendrá una capacidad para acoger a 950 pasajeros, 200 más que el máximo que circula en la actualidad. Los nuevos trenes (T100 y T200) serán adaptables a los cambios de ocupación, contarán con wifi en su interior, serán totalmente accesibles para personas con discapacidad funcional y con espacios multifuncionales para bicicletas, maletas, cochecitos de bebé, etcétera.

Locomotoras más potentes

Además, el presidente de Renfe, Raül Blanco, y el presidente de Stadler Valencia, Íñigo Parra, firmaron este miércoles el contrato de compra y mantenimiento integral de 12 locomotoras de mercancías por un importe de 112.988.234 euros, 69.540.000 euros correspondientes al suministro de las locomotoras con ERTMS (sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario) y 43.448.234 euros correspondientes al mantenimiento integral de las mismas. Esta compra está financiada parcialmente por la Unión Europea, que ha aprobado una subvención para este proyecto de 15 millones de euros para la adquisición y 1.890.000 para la instalación de ERTMS, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Next Generation.

Renfe prevé destinar estas locomotoras contratadas, de gran potencia y eficiencia energética, al Corredor Mediterráneo en el que el Administrador de las Infraestructuras Ferroviarias, ADIF, está instalando el Ancho Estándar UIC en la Red Ferroviaria de Interés General (RFIG), lo que va a suponer el aumento de la longitud máxima de los trenes de mercancías hasta 750 metros.

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