Los expertos de Funcas rebajan cinco décimas su previsión de crecimiento para España por la caída del consumo nacional

El Panel de la Fundación de Cajas de Ahorro, Funcas, que reúne los resultados de una encuesta realizada entre 19 servicios de análisis, ha empeorado en cinco décimas el crecimiento del PIB español para 2022. La nueva estimación sitúa en el 4,3% el avance del PIB, exactamente el mismo que espera el Gobierno, que hace tres semanas lo rebajó desde el 7% que había dibujado en los Presupuestos de 2022. Los expertos de Funcas justifican el recorte en la fuerte revisión a la baja del consumo público y privado, así como de la inversión, especialmente en la rama de construcción. También en unos datos de crecimiento del primer trimestre (+0,3%), más flojos de lo esperado —lastrados por la variante ómicron, la huelga de transportistas y la inflación energética—, y a la debilidad de los pocos indicadores disponibles en el segundo trimestre.

Estos datos mantienen a España todavía alejada de la llamada estanflación —inflación sin crecimiento económico—, pero recoge un escenario más adverso propiciado por la invasión en Ucrania, la crisis energética, los confinamientos en China y la alta inflación. Precisamente en este último baremo, el de los precios, también hay novedades: la encuesta recoge ahora una previsión de inflación media anual del 6,9%, 1,5 puntos más, aunque la moderación será patente en 2023, cuando esperan que caiga al 2,2%, muy cerca del nivel del 2% objetivo del Banco Central Europeo.

El gran recorte del crecimiento este año provendrá de la demanda nacional, que aportará 3,3 puntos porcentuales, ocho décimas menos respecto al consenso de marzo. Por el contrario, el sector exterior sumará un punto al PIB, lo que supone una mejoría de tres décimas, aunque no será por un mayor brío de los envíos al extranjero, sino debido a la rebaja del crecimiento esperado de las importaciones.

Con este cambio en sus predicciones, la mayoría de servicios de estudios y organismos comparten unos números parecidos sobre el crecimiento de la economía española. Entre los más optimistas están el Fondo Monetario Internacional (4,8%) y el Banco de España (4,5%), aunque esta última institución ya ha anunciado que volverá a revisar sus cifras a la baja. “La guerra ha aumentado mucho el grado de incertidumbre sobre los agentes económicos y ha provocado un repunte muy fuerte de los precios energéticos, materias primas y alimentos”, señaló este miércoles el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos. La Comisión Europea es más cautelosa, y apuesta por un crecimiento del 4% para España.

Entre las entidades que participan en la encuesta de Funcas cada dos meses, el crecimiento oscila entre el 3,7% y el 4,9%, pero la media queda en el citado 4,3%. Para el año próximo vaticinan una cierta ralentización, hasta el 3%, por el debilitamiento de la aportación de la demanda nacional, y sobre todo, por la nula contribución del sector exterior. En el comunicado publicado este jueves, apuntan a que la desaceleración no es solo un fenómeno español. “Las perspectivas de recuperación se empañan tanto en España como en el resto de los principales países por la intensificación de las incertidumbres en todo el mundo. Las perturbaciones geopolíticas y de oferta agravan las tensiones inflacionistas, abocando a un endurecimiento de la política monetaria, con el consiguiente impacto en la demanda”, concluyen.

En cuanto al mercado laboral, la tasa de desempleo media anual bajará hasta el 13,7% en 2022 —dos décimas menos que en el anterior Panel— y al 13,2% en 2023. El Ejecutivo, en cambio, es más optimista: calcula que el paro cerrará este año en el 12,8%. para bajar al 11,7% en 2023. Por último, el Panel prevé una reducción del déficit público en estos dos años. En 2022 se situaría en el 5,5% y en 2023 en el 4,8%, lo que supondría cinco y nueve décimas más, respectivamente, frente a la previsión del Gobierno.