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La flota pesquera española permanecerá amarrada hasta el miércoles ante la subida del precio del combustible

La Federación Nacional de Cofradías de Pescadores anuncia un paro hasta la reunión que está previsto que mantenga el sector el 23 de marzo con el ministro de Agricultura y Pesca

Barcos en Colindres, Cantabria, amarrados por la subida combustible.
Barcos en Colindres, Cantabria, amarrados por la subida combustible.Miguel Ramos (EFE)

La flota pesquera española permanecerá amarrada a puerto ante la subida del combustible hasta el próximo miércoles, cuando está previsto que los representantes de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores mantengan una reunión con el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. Así lo ha manifestado la noche de este viernes en una nota de prensa la organización ante el “momento gravísimo” que sufre el sector.

“La sostenibilidad del sector pesquero está ahora mismo en manos del ministro Luis Planas”, señala el comunicado. El presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores, Basilio Otero, ha pedido “propuestas firmes, contundentes o inmediatas porque si no el sector pesquero se va a pique”. El paro afecta a unas 200 cofradías y 40.000 afiliados, de los cuales 9.000 son propietarios de embarcaciones.

Las flotas pesqueras de varias zonas y algunas lonjas ya habían paralizado esta semana su actividad. El Ministerio de Pesca apuesta por medidas europeas para tratar de aliviar los costes que sufre el sector por la subida del precio de los combustibles. “El gasoil nos ha desbordado. No queremos que ir al mar signifique únicamente pagar combustible”, aseguró Otero este jueves en el programa La Hora de la 1 de TVE. Asimismo, explicó que el sector ha pedido ayudas para el pago de la Seguridad Social o las tasas portuarias. La Federación Nacional de Cofradías de Pescadores lamenta, además, que los fondos europeos se hayan quedado sin utilizar.

La huelga de transportistas, que también ha sido motivada por el encarecimiento de los combustibles, ha ocasionado escasez de productos frescos y el cierre de varias factorías. Este paro de la flota será un nuevo problema añadido. De momento, en los supermercados solo se ha visto escasez de aceite y harina. Las industrias láctea y siderúrgica han sufrido las consecuencias de la huelga en el transporte y varias factorías han tenido que parar su producción.

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