El empleo resiste los efectos de la guerra de Ucrania: en marzo se crearán 30.000 puestos de trabajo

La guerra en Ucrania ha contribuido a disparar los precios de la energía y de algunas materias primas, pero no ha desestabilizado al mercado de trabajo, en la medida en la que la creación de empleo mantiene también en marzo la senda iniciada a comienzos de año, según los datos que maneja el Ministerio de Seguridad Social y que este miércoles ha presentado el ministro José Luis Escrivá. A tenor de los números recabados hasta el día 15, el departamento de Escrivá proyecta para final de mes la creación de 30.000 empleos, al mismo tiempo que descubre una prevalencia de la contratación indefinida sobre la temporal superior a la contemplada en los meses anteriores. Tres de cada cuatro contratos firmados en marzo hasta el momento han sido indefinidos, un porcentaje más alto que en los dos primeros meses del año. “La reforma laboral está teniendo unos efectos extraordinarios en cuanto a la reducción de la precariedad”, ha justificado el ministro.

La invasión rusa en Ucrania ha alterado el tablero económico mundial, y su repercusión más inmediata ha afectado a las energías, especialmente al petróleo, el gas y la gasolina, que han alcanzado precios récord en las últimas semanas. Sin embargo, el efecto del encarecimiento de estas materias ―además del de los cereales y del aceite de girasol―, que ya venía produciéndose desde la irrupción del coronavirus, no parece hacer afectado a la contratación, a tenor de los datos del Ministerio de Seguridad Social.

“Estos 30.000 trabajadores más en el mes de marzo son datos muy parecidos a los que se producían en este mismo mes en los años anteriores a la pandemia”, ha indicado Escrivá, quien también ha observado que los efectos de la guerra, estadísticamente, no se han manifestado en sus proyecciones. A su juicio, el escudo de la reforma laboral, que entró en vigor el 31 de diciembre del pasado año, ya ha manifestado su solidez durante los primeros compases de 2022, y en el tercer mes del año vigente incluso ha superado las expectativas.

“Con estos datos se confirma que todo lo que se contempla en la reforma está muy bien hecho, puesto que son números consistentes con el dinamismo del mercado de trabajo”, ha señalado el ministro. “Además, se dan en medio de un entorno internacional complejo, lo que demuestra que no es óbice para que el mercado de trabajo funcione bien”, ha remachado Escrivá.

Mayor duración

De acuerdo con el crecimiento de la contratación indefinida ―un posicionamiento primordial de la reforma laboral, puesto que lo sitúa como la fórmula central en las relaciones laborales―, el ministro de Seguridad Social también ha celebrado un aumento en la vigencia de los contratos temporales. Según sus estadísticas, los contratos de un solo día han pasado a representar el 11% del total, y los que van de dos a siete días el 16,9%. Se trata, sin embargo, de una rebaja sustancial, puesto que ambos venían representando respectivamente el 30% dentro de esta modalidad de contratación. Junto a esta estadística, Seguridad Social también ha constatado que cerca de la mitad de los contratos que se firmaron durante los meses de enero y febrero siguieron vigentes (como mínimo) hasta el 10 de marzo.

El aumento en el número de relaciones laborales indefinidas se ha trasladado también a algunos de los sectores en los que se alojaban las mayores cuotas de temporalidad. Es el caso de la construcción, donde en el mes de marzo se han realizado bajo esta modalidad un 74% de los contratos; y del sector de alojamiento, en el que se ha llegado hasta el 76% de las contrataciones. Como consecuencia de este cambio de dinámica en materia laboral, en los últimos dos meses y medio se han computado 343.000 afiliados indefinidos más y 318.000 afiliados temporales menos.