La farmacéutica Uriach vende su negocio de genéricos y dos fábricas para centrarse en los productos sin receta
La operación, cerrada con la firma de capital riesgo española MCH, comportará el traspaso de cerca de 420 empleados
La compañía farmacéutica catalana Uriach ha anunciado este lunes la venta de dos fábricas que tiene en España y el traspaso de su negocio de productos genéricos, productos para terceros e investigación de nuevas moléculas. La operación se ha cerrado con la firma de capital riesgo española MCH y un grupo de inversores familiares catalanes, que asumirán el traspaso de cerca de 420 empleados. La compañía no ha hecho pública la cifra de la venta de esta rama de su negocio, que supone una facturación de unos 80 millones de euros. El consejero delegado de Uriach, Oriol Segarra, ha explicado que el objetivo es centrarse en el negocio de medicamentos sin receta y productos naturales con base científica, una transformación de la farmacéutica con la que esperan alcanzar una facturación de 450 millones de euros en 2025.
La farmacéutica, ha explicado Segarra en una rueda de prensa, llevaba ya una década centrada en el proceso de transformación hacia lo que llama Natural Consumer Healthcare, que engloba todo el negocio de medicamentos de venta libre. “La venta de nuestro negocio B2B [así denomina la empresa a la rama de la empresa que se vende] es la culminación del proceso. Queríamos tener una empresa más grande, más rentable pero también más ligera y flexible”, ha explicado el consejero delegado. Con este viraje, la empresa quiere convertirse en líder del sector en Europa y llevar a más mercados internacionales marcas insignia como Fisiocream, Aquilea o Laborest.
La compañía cerró 2020 con una facturación global de 165 millones de euros. La previsión para este año 2021 es superar los 235 millones de euros, de los cuales 80 corresponderían a la rama de negocio que se ha vendido. El crecimiento experimentado se debe en parte a la adquisición realizada en Alemania recientemente de la empresa Sidroga. El consejero delegado ha explicado que la farmacéutica lleva años en un crecimiento acelerado, y que enfocarse solo en el negocio de medicamentos de venta libre permitirá doblar los ingresos solo en cuatro años: la previsión es alcanzar una cifra de entre 450 y 500 millones de euros en 2025.
El acuerdo para la venta del B2B, firmado hace unos días, se cerrará completamente cuando se obtenga el permiso de las autoridades de competencia, momento en el que Uriach dejará el mando sobre el negocio B2B. Incluye la venta de la planta química Urquima, en Sant Fost de Campsentelles, y de la planta farmacéutica de Palau-Solità i Plegamans (ambas fábricas en la provincia de Barcelona). Esta última se dedica en un 75% a la producción del negocio B2B. Uriach seguirá presente en esta fábrica con la producción del negocio de Natural Consumer Healthcare mediante un acuerdo con la nueva empresa.
La nueva compañía que surgirá tras la compra por parte de la firma MCH se dedicará al desarrollo de nuevos productos y a la internacionalización, ha explicado Segarra. El negocio B2B de Uriach ha sido el responsable de productos como el antihistamínico Rupatadina y su entrada en mercados como Japón, Corea del Sur o Canadá. Por su parte, la nueva Uriach quiere centrarse también en la internacionalización. Segarra ha aclarado que todavía no tienen ninguna nueva adquisición asegurada en el horizonte, pero ha afirmado que continuarán comprando empresas para estar presentes tras afianzarse en el mercado español, el italiano (con la compra de Laborest en 2015 y de A.R. Fitorfarma y Progine en 2019), en Portugal (con la compra de Theralab en 2018) y Alemania, Austria y Suiza desde este año con la adquisición de Sidroga.
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