Escrivá llevará al Congreso en 15 días la reforma del complemento de maternidad de las pensiones

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha asegurado este lunes que ya “está prácticamente cerrada” la modificación del complemento de maternidad de las pensiones. Este plus, que actualmente cobran las mujeres que hayan tenido dos o más hijos, fue introducido en 2016 por el Gobierno de Mariano Rajoy. Escrivá ha adelantado en una entrevista en el programa Al Rojo Vivo que se ha “prácticamente llegado a un acuerdo con los sindicatos y la patronal sobre este asunto” para “reducir la brecha de género que hay en el sistema de pensiones”.

La modificación también llega porque el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) decretó en diciembre de 2019 que el artículo 60.1 de la Ley General de la Seguridad Social que reconoce este complemento es discriminatorio para los hombres. El fallo dio la razón a un padre de dos hijas que había solicitado este suplemento.

El citado artículo dispone que el incentivo se reconoce solamente a las mujeres beneficiarias de cualquier tipo de pensión contributiva, sea de jubilación, viudedad o incapacidad permanente “por su aportación demográfica a la Seguridad Social”. La nueva redacción prevé que también los hombres puedan acceder al incentivo, ya que se analizarán las trayectorias de cotización de los progenitores para saber cuál de los dos tuvo las mayores lagunas en su carrera laboral para dedicarse al cuidado de los hijos.

El complemento ahora en vigor asciende al 5% para las mujeres que hayan tenido dos hijos, al 10% para tres hijos y al 15% a partir de cuatro. Se reconoce también en caso de adopción.

“Tenemos el problema, sobre todo de mujeres que, después de tener su primer hijo y sobre todo el segundo hijo, dejan el mercado laboral. Esto estamos a punto de corregirlo. Hemos prácticamente llegado a un acuerdo con los sindicatos y la patronal sobre este asunto”, ha asegurado este lunes Escrivá. Mientras tanto, los tribunales españoles ya han empezado a reconocer el complemento a los padres que demandan, ya que la Seguridad Social no les reconoce aún el complemento pese a la sentencia del TJUE.

Modificar los umbrales para acceder al ingreso mínimo vital

El ministro también ha avanzado que se está estudiando modificar los umbrales para tener acceso al ingreso mínimo vital (IMV) tras admitir que el reconocimiento de esta prestación “no va al ritmo” deseado. “Pero no en términos de lo que estamos procesando, sino que estamos rechazando más de lo que nosotros pensábamos”, ha aclarado. Esta ayuda de último recurso, aprobada a finales del pasado mayo para complementar los ingresos de familias vulnerables, ha llegado a unos 200.000 hogares frente a los 850.000 previstos.

Escrivá ha explicado que una parte importante de los rechazos están motivados por el hecho que los solicitantes tienen una renta o un patrimonio neto, excluyendo la vivienda, superior a lo que se pensaba. Y ha añadido que también hay problemas para identificar los núcleos de convivientes. Por ello, ha adelantado que también los servicios sociales y las ONG ayudarán en la tarea de identificarlos.

El ministro también ha adelantado que espera llevar al Congreso “en pocas semanas” la fórmula para revalorizar las pensiones basada en el IPC ―asunto que se está hablando con los agentes sociales “con discreción”― y medidas relativas al endurecimiento de la jubilación anticipada y a incentivar el retraso voluntario de la edad de jubilación. Otro de los asuntos que quedan pendientes, y sobre los que está trabajando Seguridad Social, es la modificación del régimen de los autónomos, para que coticen en función de sus ingresos reales, tal y como recomienda el Pacto de Toledo.

Preguntado sobre la polémica relativa al periodo de cálculo de las pensiones, que ha causado tensión entre los socios del Gobierno, Escrivá ha asegurado que se está trabajando en ello y que hay que hacer cálculos precisos, y “que no es razonable divulgar conversaciones privadas”. En cuanto a la derogación de la reforma laboral, ha añadido que tampoco el marco preexistente funcionaba bien, ya que la tasa de paro estructural siempre ha sido muy elevada.