Ford acuerda la salida de 350 trabajadores de su factoría en Almussafes por la caída de producción
Los sindicatos UGT y CC OO refrendan el acuerdo porque busca que no se den despidos traumáticos
La caída de la producción de vehículos ha pasado factura al empleo de la factoría de Ford en Almussafes (Valencia), y dirección y los sindicatos UGT y CC OO han firmado este jueves un ERE que supondrá la salida de 350 empleados en la planta valenciana. Con este recorte, la factoría se queda con una plantilla por debajo de los 7.000 trabajadores.
El presidente del comité de empresa de la factoría y dirigente de UGT, Carlos Faubel, ha valorado el acuerdo porque incluye diferentes medidas para que “prácticamente se garantice que no haya ningún despido traumático, con un plan de acompañamiento hacia la jubilación de los empleados mayores de 57 años". José Arocas, portavoz de CC OO, ha asegurado que el ERE recoge el “99% de las propuestas planteadas por el sindicato".
Las bajas se cubrirán asumiendo la empresa el pago de un complemento salarial del 85% hasta los 65 años, aunque el trabajador se dé de baja con 63 años. Revaloriza las cuantías anuales en un 2% cada uno de los años siguientes a los 65 y garantiza el seguro de vida hasta esa edad. El expediente ha recibido el apoyo de UGT, sindicato mayoritario, y de CC OO, mientras STM y CGT no lo han refrendado.
El acuerdo en torno al ERE, que se planteó antes de que se declarase el estado de alarma por la bajada de la producción en 100 unidades diarias, se produce después de un proceso de negociación en el que la compañía ha rebajado de 410 a 350 el número de despidos en Almussafes.
La firma del ERE se produce el mismo día que el fabricante de automóviles Nissan anuncie el cierre de sus planta de Barcelona, lo que supondrá el despido de los cerca de 3.000 puestos de trabajo. "Tenemos que evitar que nos pase lo que a la planta de Nissan. Es lamentable que la gente se quede sin empleo”, ha dicho Faubel.
Una época de incertidumbre
La factoría valenciana de la multinacional norteamericana se encuentra en estos momentos bajo los efectos de un expediente de regulación temporal de empleo a causa del Covid-19, que concluirá a finales de julio. En 2019 se vieron sometidos igualmente a otros cuatro expedientes de regulación temporal de empleo en un momento de gran incertidumbre para el sector de la automoción.
Almussafes recibió hace unos meses como un auténtico mazazo a sus planes de futuro el anuncio de la multinacional de que perderá a partir de 2022 la fabricación de la nueva generación de motores y que se trasladará a sus plantas de Norteamérica. Los sindicatos pidieron a la dirección de Ford Europa una alternativa que garantice la viabilidad de la planta española pero el coronavirus lo ha retrasado todo. “En septiembre, volveremos a insistir en la búsqueda de soluciones. No vamos a parar hasta que nos digan por qué no podemos fabricar en Valencia motores híbridos”, indicó Faubel.
En este contexto, la reciente apuesta de Ford España por la electrificación de los vehículos que fabrica en Almussafes no parece suficiente. La multinacional inyectará en la planta de Almussafes 42 millones de euros para apoyar la electrificación de varios de los modelos que salen de la cadena de montaje de la planta valenciana. En concreto, se invertirán ocho millones para fabricar la versión híbrida de sus monovolúmenes S-Max y Galaxy, otros 10 millones serán para las versiones híbridas del Ford Kuga -que ha comenzado a fabricarse en el centro valenciano-, y los restantes 24 millones de euros servirán para poner en marcha dos líneas de ensamblaje de baterías para vehículos electrificados a partir de septiembre próximo.
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