Exceltur calcula una pérdida de más del 30% del negocio turístico en 2020 a causa del coronavirus
El sector reclama medidas específicas para amortiguar un impacto de 55.000 millones de euros
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La crisis del coronavirus tendrá un impacto de 55.000 millones de euros en el sector turístico español durante el año 2020, una caída del 32,4% respecto al escenario previsto antes de la pandemia. Ese es el cálculo que ha hecho el lobby Exceltur, que agrupa a empresas turísticas como aerolíneas, hoteles o negocios de alquiler de coches. Según explica el organismo en un informe, la Covid-19 “ha golpeado a nuestra actividad mucho antes y con mayor intensidad y velocidad que a ningún otro sector de la economía española”. Para amortiguar el impacto, Exceltur propone un programa de medidas específicas como las que ya han llevado a cabo algunos países europeos, entre las que estarían aplazar el pago de impuestos y ampliar el período de vigencia de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).
Las restricciones de movimientos decretadas por el Gobierno tras el establecimiento del estado de alarma, el pasado 15 de marzo, y el cierre de los hoteles que entró en vigor la semana pasada han dado la puntilla a una actividad económica que representa el 12% del PIB y el 13% del empleo en España: el 30 de marzo, el 98% del negocio había desaparecido, según Exceltur.
El lobby turístico estima que el impacto de la crisis en el sector va a ser “muy superior” al de cualquier otro, y califica la situación de “trance sin precedentes”. En línea con las críticas expresadas en los últimos días por la patronal, Exceltur denuncia que el Gobierno se ha preocupado mucho de las personas más desfavorecidas desde que empezó la crisis pero poco por las empresas, y califica las medidas para estas de “exiguas, muy testimoniales y poco relevantes”. “Nos jugamos que el turismo pueda volver a ser el principal motor económico”, apostilla.
El informe vaticina que el vacacional será uno de los últimos sectores en recuperarse de la crisis, y que lo hará a dos velocidades: primero en los viajes en vehículo privado a escala nacional y más tarde en los desplazamientos internacionales en medios de transporte colectivos. Los pequeños alojamientos empezarían a superar el bache antes que los grandes.
En el escenario central que baraja Exceltur, el turismo, a diferencia del conjunto de la economía, no tendrá una salida de la crisis en forma de U. Es decir, no habrá una rápida recuperación del negocio tras la emergencia sanitaria, sino que el lobby prevé que la turística será la actividad “que más sufrirá y más tardará en recuperarse en el tiempo, sobre todo el componente de la demanda externa”.
Más ayudas al sector
Para evitar que el daño que la pandemia ha infligido al sector sea irreversible, el lobby pone como ejemplo a seguir las iniciativas llevadas a cabo por los Gobiernos de Estados Unidos, Reino Unido, Francia o Alemania. Sostiene Exceltur que, pese a que sus economías dependen menos del turismo que la española, estos países han aprobado rescates de grandes touroperadores y aerolíneas, líneas de crédito específicas para la hotelería y la restauración o normativas para sustituir devoluciones de viajes por bonos. El Ejecutivo alemán ultima estos días el rescate del touroperador TUI, con una inyección de 2.000 millones de euros.
Sin embargo, Exceltur considera que en España las medidas del Gobierno son insuficientes, y reclama un plan “mucho más ambicioso” para salvar el sector. Entre otras acciones, el lobby propone aplazar los pagos de las cuotas de la Seguridad Social y de todo tipo de impuestos, ampliar la línea de avales hasta los 200.000 millones de euros anunciados por el Ejecutivo—de momento se han habilitado 20.000— y crear una línea específica para las actividades turísticas o sustituir las devoluciones de viajes por bonos canjeables. Además, reclama adaptar los ERTE a las particularidades de un sector que tardará más en recuperarse que el conjunto, de tal manera que no cesen cuando finalice el estado de alarma.
El lobby turístico advierte: en juego está una caída del 5,5% del PIB español en 2020, de la que casi la mitad (el 46,8%) sería provocada por la profunda recesión que vivirá el sector.
