Volkswagen invertirá 44.000 millones para desarrollar sus coches eléctricos
El fabricante alemán presenta un plan hasta 2023 con la vista puesta en liderar el mercado
El grupo Volkswagen ha anunciado este viernes que invertirá 44.000 millones de euros en cinco años para la fabricación de coches eléctricos y autónomos, así como en otros servicios de movilidad y en la digitalización de sus vehículos y fábricas. El presidente del Consejo de Supervisión del mayor fabricante de automóviles del mundo, Hans Dieter Pötsch, ha dicho en rueda de prensa que la compañía busca convertirse en “un proveedor mundial de movilidad sostenible”.
Para llevar a cabo el plan, el grupo quiere redistribuir las tareas de sus plantas en Alemania. En Hannover y Emden solo se construirán vehículos eléctricos, mientras que Zwickau, en el este, se convertirá en una fábrica altamente automatizada.
En esa planta se fabricarán pronto los primeros coches de la serie I.D., como se conoce a la gama de vehículos eléctricos que el grupo desarrolla a partir de una misma plataforma modular. Su llegada al mercado en 2020 representa una nueva era para la compañía, que lo compara con el primer Beetle (escarabajo). El primer I.D. en venta será un turismo con un alcance de 550 kilómetros y un precio comparable al de un Golf de diésel.
“Esto hará que millones de personas se puedan permitir un automóvil eléctrico”, ha asegurado el consejero delegado, Herbert Diess, quien ha definido el nuevo modelo como “100% neutral en emisiones, lo que incumbe a todo el proceso de producción, incluida la fabricación de las baterías”.
Una nueva planta en Europa
La comparecencia ante los medios ha servido también para anunciar la construcción de una nueva planta que fabricará vehículos de varias marcas, entre ellas Seat. “Estamos buscando un lugar en Europa del Este”, ha precisado el consejero delegado.
“El plan de inversiones representa aproximadamente un tercio de los gastos totales previstos para los próximos cinco años”, ha señalado desde la sede de Wolfsburgo Hans Dieter Pötsch después de que el Consejo aprobara los planes presentados por Diess.
En la actualidad, Volkswagen produce seis modelos alimentados por baterías, pero gracias al nuevo plan de inversiones, el grupo estará en condiciones de ofrecer más de 50 modelos en el futuro cercano.
Para asegurar la expansión planificada de la producción de eléctricos —un millón al año a partir de 2025— el grupo ha definido proveedores estratégicos para los coches familia I.D. Se trata de los fabricantes chinos y coreanos SKI, CATL, LG Chem y Samsung.
Precisamente, Volkswagen y sus socios chinos preven invertir más de 4.000 millones de euros en movilidad eléctrica y digitalización en el país asiático el próximo año. Para 2020, la compañía quiere tener la mayor gama de modelos electrificados y que lleguen al mayor mercado del mundo.
10.000 millones más que en el plan anterior
El plan de inversión de Volkswagen para el próximo lustro aumenta en 10.000 millones las provisiones del grupo con el fin de lanzarse a la fabricación masiva de coches eléctricos. Hace un año, cuando la multinacional anunció un plan de inversiones también a cinco años (por tanto, hasta 2022), la partida era de 34.000 euros.
Este viernes en Wolsfburgo ha crecido hasta los 44.000 millones, aunque algunas de las medidas anunciadas, como la importancia que tendrá la planta alemana de Zwickau en el desarrollo de la gama de eléctricos, ya se habían apuntado.
Otras fábricas, como la de Emden (también en Alemania), sí han visto cambiar su destino en doce meses. Hace un año se anunció que concentraría el Volkswagen Passat, pero el nuevo plan lleva ese modelo a una planta en la República Checa. Lo que no ha cambiado es la intención: “Estamos sentando las bases para convertir a Volkswagen en el jugador número uno del mundo en movilidad eléctrica en 2025”, dijo hace ya un año el entonces consejero delegado del grupo, Matthias Müller.
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