Blas Calzada, un gran profesional
Desaparece un hombre de gran cultura capaz de mantener siempre viva la llama de la amistad. Un hombre verdaderamente sabio, generoso y entrañable
Llegaba siempre con una sonrisa por la que a veces asomaba un relámpago de tristeza o de comprensión resignada del mundo. De un mundo al que contribuyó a transformar con su esfuerzo, siempre tenaz y valiente. Blas Calzada fue, en 1977, uno de los cuatro redactores del documento que sirvió de base para los Acuerdos de la Moncloa. Era entonces Director General de Estadística, un cargo que aceptó porque pensaba que la democracia era impensable sin un buen sistema estadístico que hiciera posible, no solo el diagnóstico racional de los problemas económicos, sino también, y de manera esencial, la transparencia del sistema.
Tras su licenciatura en Ciencias Económicas en Madrid amplió sus estudios en París gracias a un programa especial de becas organizado en Francia por un alto funcionario francés, Jean Simonet, resistente frente al nazismo y buen amigo de España, ayudado eficazmente por el entonces joven estudiante, Crisanto Plaza. Este programa fue una especie de contrapunto a los programas de becas oficiales a los que los jóvenes opositores al franquismo apenas tenían acceso y por el que pasaron estudiantes que más tarde tuvieron gran relevancia en la España democrática, como Juan Salas, fundador de la Revista Cambio 16, en cuya fundación también participó Blas Calzada, Joaquín Leguina, Manuel Castells, Ana Cabré y muchos otros.
Tras su paso por la Administración, Blas Calzada fue, durante muchos años, el Director de Estudios de la Bolsa de Madrid y más tarde, Presidente de la recién creada Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Llegó a ella en un momento difícil, tras el escándalo de Gescartera y supo darle un sello de profesionalidad y rigor indispensable para su consolidación como institución supervisora y reguladora de las bolsas españolas. Pudo hacerlo gracias a su profundo conocimiento de los mercados en todas sus facetas, a su viva inteligencia y a su proverbial instinto para apartarse de los caminos trillados y buscar soluciones prácticas a los problemas más difíciles. Prueba de su profesionalidad ha sido la presidencia, hasta el final, del Comité Asesor Técnico del Ibex.
Con Blas Calzada desaparece un gran profesional, un hombre de gran cultura capaz de mantener siempre viva la llama de la amistad. Un hombre verdaderamente sabio, generoso y entrañable. Un gran español.
Jose Luis Leal fue presidente de la Asociación Española de Banca (AEB).
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