Cañete ve “necesaria” una cumbre con Francia para potenciar las interconexiones

El comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, ha manifestado hoy que "sería necesaria una nueva cumbre entre España, Portugal y Francia para relanzar las interconexiones" con la presencia del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy; el primer ministro portugués, António Costa, y el presidente francés, Enmmanuel Macron. "Ninguna de las propuestas que hemos puesto sobre la mesa y en particular las referentes a energías renovables y el mercado de la electricidad pordrá ser plenamente efectiva si no disponemos de una adecuado nivbel de interocnexiones", argumentó Cañete, que aseguró que la península se encuentrta en una situación "absolutamente crítica".

Para el comisario, que intervino en un desayuno organizado por el Forum Europa, "la prioridad política de esta Comisión es completar el mercado interno de la energía, en particular a través de la construcción de los proyectos de interconexión entre Estados miembros". Y para sostener su propuesta apeló al discurso que el propio Macron pronunció en la Cumbre sobre calentamiento global de Bonn recientemente en el que dijo que "debemos comprometernos con el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y una de las áreas de actuación prioritarias requiere alentar y participar activamente en la financiación de todas las interconexiones energéticas que necesitamos entre Alemania y Francia, pero también con Irlanda, España, Italia, el Benelux y Portugal. Porque estas interconexiones garantizarán un mejor uso de las energías renovables en todo el continente y, en particular, en la Unión Europea. Porque estas interconexiones son la mejor garantía para acelerar la reducción de las emisiones de carbono".

El Consejo Europeo otorgó en octubre de 2014 un mandato a la Comisión para tomar medidas urgentes para alcanzar un objetivo mínimo del 10% de las interconexiones de electricidad, en particular para los estados miembros que no hayan logrado un nivel mínimo de integración en el mercado interior de la energía, que son los bálticos, Portugal y España, y para los que constituyen el principal punto de acceso de estos estados al mercado interior de la energía. El Consejo Europeo también invitó a la Comisión a que presentase propuestas con la finalidad de alcanzar un objetivo del 15% en 2030.

A día de hoy, 17 estados miembros ya han alcanzado el objetivo de interconexión del 10%, beneficiándose de mayores intercambios de electricidad y de la reducción de los precios al por mayor.  Sin embargo, algunas regiones de la UE como la Península Ibérica todavía no están completamente integradas en el mercado interno de la energía. Esta situación penaliza la competitividad de las empresas de países periféricos como España y Portugal, impidiéndoles participar en igualdad de condiciones en el mercado interno europeo.

Precisamente, la Comisión acaba de adoptar la semana pasada un ambicioso paquete de Infraestructura para fortalecer la infraestructura energética europea y acelerar la puesta en marcha de proyectos estratégicos como las interconexiones eléctricas entre la Península Ibérica y el resto de Europa. Ese paquete propone un nuevo enfoque para alcanzar el objetivo de interconexión eléctrica del 15% para 2030.

Este objetivo se dividirá en tres tramos operativos para alcanzar los objetivos de seguridad de suministro, integración de mercado y sostenibilidad y servirán como indicadores para medir el progreso realizado en el desarrollo de la red eléctrica y para identificar las áreas en las que es necesario realizar esfuerzos adicionales. En ese sentido, s eha elbaorado una lista de Proyectos de Interés Común, en la que de los 173 proyexctos, 110 son eléctricos, 53 gasísticos y cuatro de petróleo.

Cierre de centrales

Cañete también ha comentado que la Comisión Europea está analizando si el borrador de real decreto para el cierre de centrales eléctricas que pretende sacar adelante España es "compatible con la legislación comunitaria". En ese sentido, recordó que la ley de 2013 en que se sustenta el real decreto que elabora el Ministerio de Energía español para regular el cierre de centrales de producción obtuvo el visto bueno de Bruselas tras una queja y un periodo de investigación.

No obstante, ha subrayado que Bruselas no está para "entrar en polémicas entre un país y una empresa". No obstante, dejó claro que Bruselas no está para "analizar posicionamientos de gobiernos y empresas", en referencia a la batalla entre el Ministerio de Energía e Iberdrola por la petición de cierre de sus centrales térmicas de Lada y Velilla.

Respecto al servicio de interrumpibilidad, por el que las empresas electrointensivas reducen o suspenden su consumo de energía cuando el sistema no logra atender la demanda, sostuvo también que Bruselas está en diálogo con el Gobierno español para ver qué "ayudas son de Estado y compatibles" con las reglas comunitarias.