Los reyes de los gases medicinales
Carburos Metálicos, con 120 años de trayectoria, provee productos a más de una treintena de sectores industriales
No los vemos, pero gases de todo tipo están presentes en muchos de los productos que se consumen en la vida cotidiana. Bebidas carbonatadas, alimentos congelados, el oxígeno medicinal de los hospitales o productos de la construcción y la industria necesitan gases para ser fabricados. En España, el principal responsable de que esto sea posible es la Sociedad Española de Carburos Metálicos, una empresa fundada en Berga (Barcelona) en 1897 que, con 120 años de historia, es líder en el sector, con una cuota de mercado del 30%. La longeva empresa, que desde 1995 forma parte de la multinacional estadounidense Air Products, combina inversiones en innovación y el desarrollo sin perder de vista su negocio tradicional: producir, envasar, distribuir y vender gases medicinales e industriales a más de 30 sectores.
La compañía empezó con la producción de carburo cálcico — de ahí el nombre— utilizado en la fabricación de acetileno para sopletes e iluminación, aprovechando las aguas del Llobregat a través del recién inaugurado Canal Industrial de Berga. El primer gran proyecto de la empresa fue instalar el alumbrado público a acetileno de Piera. Desde entonces, la compañía se expandió a Madrid, Valencia, Bilbao o Sevilla, y amplió su oferta a otras áreas de negocio.
En 1995, Carburos Metálicos se incorporó al grupo estadounidense Air Products, una compañía de gases industriales presente en más de 50 países y con 16.000 empleados. Con unas ventas mundiales de 7.500 millones de dólares en 2016 y una capitalización de mercado aproximada de 30.000 millones de dólares, Air Products vende en Europa el 27% de su facturación. Carburos Metálicos pertenece a la división del sur de Europa de la multinacional, cuyo director general es, desde el año pasado, Ahmed Hababou.
“Hay tres factores que nos caracterizan, y son la apuesta por la seguridad, el equipo humano y la voluntad de transformación constante”, explica Hababou por correo electrónico. En estos tres ejes el director general ve la fórmula del éxito de una empresa que, a pesar de la crisis, ha mantenido el liderazgo. “Tenemos una tradición de excelencia que hemos heredado y que ha sido construida por personas con talento y motivadas para tener éxito”, asegura Hababou. Añade que la clave consiste en estar cerca de los clientes, conocer sus necesidades y no dejar de invertir en innovación.
La empresa sigue activa en el negocio de la soldadura; pero hoy su fuerte es la producción de gases en el ámbito hospitalario, especialmente el oxígeno que se usa para la respiración asistida o el óxido nitroso que alivia el dolor de los pacientes durante las cirugías. El sector sanitario pasó a ser tan importante para esta compañía que, hace 65 años, creó expresamente la marca Carburos Médica, que se convertiría en la referencia en el mundo hospitalario. “Somos pioneros en el suministro de instalaciones centralizadas de gases medicinales y de vacío en hospitales”, explica Hababou.
La empresa ha desarrollado en los últimos años productos innovadores referentes en esta área, como los gases para la crioconservación, un proceso que permite preservar y almacenar células a largo plazo y que tiene aplicación, por ejemplo, en el mundo del deporte. El nitrógeno líquido facilita la recuperación física de los deportistas, y ya se usa en clubes de fútbol como el Sevilla Fútbol Club para el entrenamiento de sus jugadores.
La compañía también está presente en muchos otros sectores, desde la energía o la petroquímica hasta la alimentación y las bebidas, pasando por el negocio del vidrio. Entre los productos que fabrica para estas industrias también está el nitrógeno líquido que se usa para la congelación y el envasado de los alimentos, o el dióxido de carbono utilizado para la refrigeración o la limpieza. Los productos más vendidos son el oxígeno, el nitrógeno, el dióxido de carbono y el argón.
Una amplia red
Para cubrir tantos campos de actividad, Carburos Metálicos cuenta con cerca de 1.000 trabajadores en España, que operan en 12 plantas de producción de gas, 14 plantas de envasado y dos laboratorios para desarrollar gases de alta pureza. Esta red tan extendida por el país da servicio a más de 100.000 clientes, que además se nutren de la capacidad de innovación que se desarrolla en el centro de excelencia que la empresa tiene en Bellaterra, en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona.
No siempre fueron buenos tiempos para la compañía. Carburos Metálicos fue responsable de vertidos contaminantes de cloro en Gualba (Barcelona) en 2008 y en los años 90 estuvo implicada en el caso Banesto. Desde entonces se esfuerzan por construir una imagen de responsabilidad social y ambiental. “Fabricamos productos que respetan el medio ambiente, y también nos esforzamos por mejorar continuamente nuestras propias operaciones”, explica Hababou. Pone como ejemplo la fábrica de Telde, en Gran Canaria, donde la empresa captura y aprovecha el dióxido de carbono sobrante de la producción de vidrios y cristales de una planta vecina.
Presente en gran parte de los productos industriales, también quieren tener su papel en los cambios tecnológicos que revolucionan la industria. De momento, las nuevas tecnologías permiten a la empresa pequeñas modificaciones a través de aplicaciones y productos. Saben, por ejemplo, dónde están y cuándo tienen que renovarse el millón de botellas de gas que produce la compañía.
El director general apuesta por estar atento y conseguir un lugar en los nuevos modelos de negocio: “Todavía desconocemos el alcance y trayectoria futura de modelos como el del transporte, pero sabemos que tenemos que convivir con ellos”.
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