Los que devolvieron el dinero de las ‘tarjetas black’ pueden librarse de la cárcel
Aunque tuvieron un gasto muy elevado, la mayor parte de los directivos y algunos consejeros quizá eludan la prisión tras reintegrar lo gastado
La sentencia de la Audiencia Nacional sobre el caso de las tarjetas black diferencia muy bien el papel de 65 condenados según dos criterios: por un lado a los autores del delito continuado de apropiación indebida, que son los expresidentes Miguel Blesa y Rodrigo Rato, (condenados a seis y cuatro años de prisión, respectivamente) así como el director general, Ildefonso Sánchez Barcoj, que es "colaborador y cómplice de la operativa" (y ha sido condenado a dos años y medio). Por otro, están los "colaboradores", en donde no distingue entre exconsejeros de la entidad o los exdirectivos que cobraron ese dinero, si bien la sentencia afirma: "Entendemos merecedor de mayor reproche penal la actuación de los administradores de la caja y del banco que la de los miembros de la Comisión de Control (incluidos los representantes de la Comunidad de Madrid) y mayor también la de estos que la de los directivos, lo que igualmente tiene su reflejo en las penas". A la hora de determinar las penas de los condenados, además de la cuantía de dinero utilizado, ha sido determinantes si devolvieron lo gastado.
A los 65 les obliga a devolver el dinero al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y una pequeña parte a Bankia, hasta juntar los 12,5 millones utilizados indebidamente, más los intereses legales. A Miguel Blesa de la Parra le hace responsable de 9,34 millones, "las cantidades dispuestas entre enero de 2003 y enero de 2010 por los usuarios de las tarjetas cuya emisión autorizó". Dice que "responderá conjunta y solidariamente con cada uno de los acusados usuarios de tales tarjetas", aunque debe deducirse proporcionalmente las cantidades ya satisfechas por estos, incluidos los 436.688,42 euros gastados por Blesa que ya ha reintegrado.
A Rodrigo Rato le responsabiliza de 2,69 millones, lo dispuesto entre febrero de 2010 y mayo de 2012 "por los usuarios de las tarjetas cuya emisión autorizó y responderá conjunta y solidariamente con cada uno de los acusados" de esa etapa. Se deben descontar 98.837,12 euros ya devueltos.
Devolver el dinero ha sido clave a la hora de sufrir mayor o menor condena. El Tribunal ha decidido que se aplique un "atenuante muy cualificado para aquellos acusados que ingresaron las cantidades extraídas en Bankia o en el FROB" y un "atenuante simple para los que consignaron las cantidades judicialmente". Se supone que los que enviaron el dinero al FROB ya lo daban por perdido mientras que los que lo depositaron en el juzgado tenían la esperanza de recuperarlo.
El tribunal no ha aceptado que se aplique a Rato y Blesa el atenuante de reparación del daño por haber devuelto una parte del dinero. La razón es que "esas cantidades son muy inferiores a la propia petición de indemnización solidaria de 12 millones de euros".
No han devuelto el dinero
Entre los que no han devuelto el dinero están Antonio Moral Santín, consejero por Izquierda Unida, que gastó 456.522 euros, y ha sido condenado a cuatro años; con tres años y dos meses de condena está Francisco Baquero (CC OO), Estanislao Rodríguez-Ponga (ex secretario de Estado de Hacienda en los gobiernos de José María Aznar), Francisco Moure (PP), Antonio Romero (PSOE) y Jorge Gómez (PSOE). Otros en la misma situación son Rodolfo Benito (CC OO), Gonzalo Martín (UGT) y José María de la Riva (PSOE), con tres años de pena.
Con dos años y seis meses y, por tanto, mayor posibilidad de entrar en prisión, están Ángel Gómez del Pulgar (PSOE), Antonio Cámara (PP), Antonio del Rey (Comunidad de Madrid), Francisco Pérez Fernández (PSOE), y el director general Ildefonso Sánchez Barcoj, Rubén Cruz (IU), Javier de Miguel (PP), Miguel Ángel Abejón (PP) y Rubén Cruz Orive (IU).
Además, hay otros acusados que no han devuelto y tienen penas inferiores de dos años o menos, como son los ejecutivos, que el Tribunal considera con menos culpabilidad. Algunos de ellos gastaron mucho dinero, como Ricardo Morado (450.800 euros), Enrique de la Torre (320.000 euros), Mariano Pérez Claver (379.000 euros), Ramón Ferraz (397.000 euros) y el antiguo jefe de la Casa Real, Rafael Spottorno (235.000 euros).
Otros consejeros también gastaron cantidades importantes, pero sí las han devuelto en parte o su totalidad, tienen penas más benévolas, como Ricardo Romero de Tejada (212.000 euros) o directivos como Fernández Norniella (185.000 euros). Más de uno se habrá arrepentido ahora de no haber devuelto el dinero.
CC OO: "La indiscriminada ejemplaridad del fallo sorprende si se compara con otros"
Cinco de los condenados por la sentencia de las tarjetas black de Caja Madrid han estado relacionados con CC OO. Nada más conocerse los castigos, el sindicato ha recordado que ya "depuró responsabilidades en tiempo y forma con las personas afectadas que pertenecían" a la organización.
Aunque a continuación la central que dirige Ignacio Fernández Toxo mostró su "legítima sorpresa ante la carga de indiscriminada ejemplaridad que se observa en la sentencia en un tiempo judicial especialmente convulso, si se tiene en cuenta otras condenas dictadas e interpretadas estos días". No lo dice abiertamente, pero es obvio que CC OO está comparando este fallo con el del caso Noos, la absolución de la infanta Cristina y el hecho de que su marido, Iñaki Urdangarin, no tenga que ingresar en prisión tras ser condenado a seis años y tres meses sin abonar fianza y pueda seguir viviendo en Suiza.
El comunicado del sindicato, que dice respetar y acatar la sentencia, finaliza afirmando que "algo falla en el sistema judicial" y para denunciarlo hace referencia a la viñeta que este miércoles publica en EL PAÍS el dibujante EL ROTO en la que "con brillante ironía" se podía leer "la justicia es igual para todos, pero las condenas no".
El caso de las tarjetas black ha sido muy traumático para CC OO. Varios de los implicados pertenecían al sindicato y eran o habían sido dirigentes de la organización. Además, uno de ellos, Rodolfo Benido, es un histórico del sindicato que cuando estalló el caso formaba parte de la dirección confederal del sindicato y dirigía la Fundación Primero de Mayo.
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