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El Popular gana un 66% menos por la caída del negocio y las provisiones

El banco obtiene 94,3 millones hasta septiembre, con descensos en todos los márgenes

Íñigo de Barrón
Pedro Larena presenta los resultados del Popular.
Pedro Larena presenta los resultados del Popular.álvaro garcía

El Banco Popular se encuentra en plena transformación para intentar encontrar la rentabilidad necesaria que le permita mantenerse como un banco independiente. Bajo un consejero delegado nuevo, Pedro Larena, ha presentado este viernes los resultados hasta septiembre con un beneficio de 94,3 millones, un 66% menos que el mismo periodo del año anterior. Al contrario que otros bancos, el Popular todavía sigue elevando las provisiones por morosidad, lo que, unido al efecto de la caída de los tipos de interés, hacen caer todos los márgenes de la cuenta de resultados. El mercado recibió con pesimismo estos datos y, a media sesión, sufría un duro golpe en Bolsa.

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En su nota enviada a la CNMV, la entidad omitido una página de datos consolidados comparativos de los nueve primeros meses con los del mismo periodo del año anterior. "No vamos a dar la morosidad consolidada", afirmó Pedro Larena, consejero delegado, a preguntas de los medios de comunicación durante la presentación de resultados. Tampoco ha ofrecido la cobertura de los créditos morosos en el grupo consolidado, ni la rentabilidad sobre recursos propios (ROE),

El Popular ha divido su actividad en dos áreas, como ya tienen otros competidores. El negocio principal, con que ha ganado 816 millones, un 24% menos, y el negocio inmobiliario, con el que pierde 722,5 millones, un 9,3% menos que hace un año. Preguntado por qué no ofrecían los datos principales agregados, el director financiero, Javier Moreno, señaló que "no sería fácil de entender ni de explicar la nueva configuración del grupo, que está gestionado como dos unidades completamente diferentes".  

El banco, dividido en dos

El negocio principal incluye la actividad comercial típica, "especializada para potenciar la rentabilidad, liderando frente a competidores actividades que tienen un elevado retorno para los accionistas como pymes, consumo, tarjetas o seguros". Según el consejero delegado, esta parte es un "bancazo, que se comporta mejor que ningún otro competidor en el mercado".

La división inmobiliaria "se ha reorganizado para acelerar la desinversión de activos improductivos y maximizar el valor de la cartera, concentrándose la gestión y lanzándose la creación de una red de oficinas especializada". Aquí agrupa el ladrillo con activos malos y otros que considera que pueden tener salida en el mercado: tiene créditos por 15.518 millones, del que 7.300 millones son dudosos, e inmuebles por valor de 11.127 millones, de los que 10.236 millones son "improductivos". Esta división está provisionada con 9.858 millones.

Larena, ha avanzado este viernes que la entidad tiene previsto desgajar una parte de la división inmobiliaria en una estructura especializa en gestión inmobiliaria en el primer trimestre

de 2017. El banco planea crear una sociedad independiente de la entidad con esta área con un volumen de activos brutos cercano a los 6.000 millones y sacarla a Bolsa.

"Queremos dar liquidez al accionista, que va a tener una participación sin desembolsar ningún dinero en esta nueva empresa", ha destacado Larena, ya que se les regalará acciones en el nuevo vehículo cotizado, denominado Sunrise.

En la cuenta consolidada del grupo, la caída de tipos golpea en el margen financiero, que refleja la actividad de prestar y tomar depósitos de los clientes, que cae un 6,3%. Las comisiones descienden un 1,2%, al igual que los gastos generales, que lo hacen en un 2,2%. Las provisiones se mantienen al alza, aunque el volumen de deudores morosos ha caído un 6,2%, hasta los 17.538 millones. Tras la ampliación de capital, la entidad ha reforzado su capital, con un ratio CET 1 del 15,29%, frente al 12,65% de un año antes.

El banco se encuentra en pleno proceso de ERE para la reducción de plantilla en unos 2.600 trabajadores. Sobre este asunto, Pedro Larena ha señalado este viernes que la entidad ya ha realizado "todo el esfuerzo" que podría hacer para mejorar las condiciones de los despidos y las prejubilaciones. Ha apuntado que las condiciones que han ofrecido a los trabajadores que se verán afectados son "razonables y generosas", aunque los sindicatos reclaman mejoras que el banco no ha concedido.

Larena ha indicado que está previsto que las conversaciones con los sindicatos concluyan la semana que viene y ha añadido que las negociaciones "van bien". "Los sindicatos cumplen sus funciones y nosotros estamos haciendo un esfuerzo para acercar posiciones", ha apostillado.

Pérdidas de más de 2.000 millones este año

En varias ocasiones, los medios preguntó al consejero delegado sobre la previsión de pérdidas para este año durante la rueda de prensa. Larena confirmó que la entidad "generará pérdidas" en el cierre del ejercicio 2016, algo que "todo el mundo lo entiende y lo conoce". También apuntó que realizarán un cargo de 4.440 millones para elevar las provisiones, para lo que cuentan con los 2.500 millones de la ampliación de capital, así como el dinero generado por el banco durante el año. Los cálculos de los analistas apuntan a pérdidas de 2.200 millones, una cifra que maneja internamente la entidad, a falta de diferentes ajustes.

"No podemos adelantar" la cifra final porque "el cuarto trimestre está en plena cocina. Vamos a aplicar las provisiones para los riesgos que tenemos", explicó Larena. Además, quiso dejar claro que "actualmente los principales accionistas del banco no tienen ninguna crítica con respecto a la gestión, más bien lo contrario. Estamos aplicando el plan que tenemos, que es recuperar la rentabilidad y mantener la independencia. No analizamos ni fusiones ni otro tipo de operaciones".

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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