Staples compra su rival Office Depot

La cadena de tiendas de artículos de oficina Staples consolida su supremacía, con el anunció antes de la apertura de Wall Street de la compra de su rival Office Depot. La operación entre los dos grandes nombres del negocio lleva tiempo anticipándose en el marco del proceso de consolidación que está viviendo las grandes cadenas comerciales en EE UU. La operación está valorada en 6.300 millones de dólares (5.600 millones de euros).

Staples, la empresa líder y que pone su nombre al estadio en el que juegas de los Lakers en Los Ángeles, ofrece 11 dólares por cada acción de Office Depot, la segunda. Eso representa una prima del 45% respecto al cierre de mercado del lunes, antes de que se hiciera evidente de que el acuerdo. La sociedad que emerja de la fusión tendrá cerca de 4.000 tiendas y ventas anuales de 35.000 millones. Con las sinergias esperan ahorrar 1.000 millones.

La compra se anuncia dos años después de que Office Depot, que tiene también operaciones en algunos países europeos, adquiriera Office Max. Optaron entonces por combinar sus negocios para hacer frente a Staples y al embiste del portal de comercio electrónico Amazon. No es tampoco la primera vez que Staples lo intenta con Office Depot. Trató de hacer una operación similar en 1997, que fue tumbada por los reguladores.

Ahora, sin embargo, la situación es muy diferente en el comercio minorista. La dinámica de consumo cambió con la irrupción de Internet y los sistemas de pago electrónicos. La digitalización del trabajo, además, está reduciendo la demanda de productos tradicionales de oficina. Amazon, por su parte, estaría tratando de hacerse ahora con algunas tiendas de la cadena de electrónica Radio Shack, que está a las puertas de anunciar la quiebra.

No es solo el ímpetu con el que avanza el portal de Jeff Bezos en el mundo del comercio. Los hipermercados Walmart y Target también son en la actualidad grandes distribuidores de productos de oficina y cuentas con portales en Internet que rivalizan con Amazon. Pese a ello, las autoridades reguladoras analizaran con sumo cuidado el contexto de la operación, por los riegos que puede tener principalmente para el pequeño comercio.