El Gobierno invita a las empresas de América Latina a invertir en España
Rajoy y González destacan que las clases medias son clave para estabilizar la región
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, relacionó este jueves el alto crecimiento económico de América Latina con la buena gestión de la mayoría de los gobiernos. Pero su análisis se basó en el sector privado. Tras recordar el importante papel que han jugado las empresas españolas en el desarrollo de Latinoamérica, realizó ahora una invitación “a las empresas iberoamericanas a que inviertan en España, porque el entorno es propicio para el desarrollo de sus estrategias y sus intereses”.
El presidente del Gobierno lanzó este mensaje ante un nutrido grupo de empresarios del otro lado del Atlántico, así como altos ejecutivos españoles con intereses en Iberoamérica, que se citaron este jueves en Madrid con motivo de la XXV Asamblea Plenaria del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL), reunido por primera vez en España. Rajoy subrayó que las empresas españolas han destinado 122.000 millones a esa región, “lo que supone un tercio de todo lo invertido fuera de las fronteras” y han creado 600.000 puestos de trabajo directos.
Alierta admite que Telefónica ya es más latinoamericana que europea
Rajoy coincidió con Felipe González, expresidente de Gobierno, en que el crecimiento de las clases medias ha sido un elemento clave para el buen momento que está viviendo América Latina. “El reparto de la riqueza produce mayor cohesión social, naciones más fuertes y mejores sociedades. El incremento de la seguridad, así como la inversión en educación y pensiones han ayudado a que las clases medias crezcan un 50% en los últimos años”, apuntó Rajoy.
Felipe González destacó que los bancos y empresas de América Latina evitaron la crisis financiera de 2008 “porque ya había aprendido de las de los años ochenta y tomaron medidas, como no invertir en derivados y otros productos de los hermanos Lehman”. Criticó la forma en la que Europa se está enfrentado a esta recesión “con métodos austericidas frente a la estrategia expansiva de Estados Unidos, cuyo PIB crece un 4%. Aquí tenemos un crecimiento tan débil que no sabemos si estamos saliendo o entrando en una nueva recesión. Alemania debería saber esa máxima de que el no crece, no paga sus deudas”, comentó.
En su opinión, América Latina tiene un gran potencial de crecimiento si desarrolla el capital humano, mantiene la estabilidad política, toma el control de los precios de las materias primas y se convierte en un jugador clave en el mundo de la energía.
En el mismo acto, el presidente de Telefónica, César Alierta, afirmó que su empresa es hoy más latinoamericana que europea. “Nunca hubiéramos llegado a ser lo que somos sin la apuesta de mis predecesores por aquel continente”, ha dicho Alierta. También, ha augurado que, frente a las dudas sobre su situación actual, la región tendrá otros 25 años de crecimiento.
En la siguiente mesa de trabajo de la CEAL participaron Roberto Alcántara, presidente del Grupo Herradura Occidente, Juan Carlos Escotet, de Banesco y Jaime Gilinski, de Gilinski Group. Alcántara, primer accionista individual del grupo PRISA, editor de EL PAÍS, explicó la creación de su grupo, que incluye líneas de autobús, trenes, aviones de bajo coste y empresas de telepeaje. Y aseguró que ha entrado en el sector de la comunicación como un complemento a sus empresas: “Nos permite suministrar contenidos de la mejor calidad para nuestros clientes con el único grupo que está en los 26 países de habla hispana”. Alentó a empresas iberoamericanas a que buscaran socios en España. “Aislados somos muy débiles”, afirmó. Escotet, máximo responsable de Abanca tras comprar Novagalicia, se quejó de la tardanza en la toma de decisiones de las autoridades bancarias europeas, mientras que Gilinski comentó que su entrada en el Sabadell, donde ya tiene el 7,5%, se debió a los bajos precios de sus acciones.
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