¿Por qué me conviene llevar tarjeta de crédito en mis viajes?

Aunque no seamos muy entusiastas de pagar con tarjeta, cuando viajamos es imprescindible disponer de un plástico que nos asegure que no nos vamos a quedar tirados en cualquier parte. Muchos de los viajeros no piensan en los beneficios que pueden sacar de ellas y no por utilizarlas tienes que gastar más, ocurre incluso al revés. Es importante aprender a ahorrar usando una tarjeta.

¿Cuáles son las ventajas más importantes?

Las tarjetas son un medio de pago aceptado en cualquier país del mundo. Nos facilitará mucho la vida porque no será necesario realizar numerosos cambios de moneda, que a la vuelta del viaje no podamos convertir en euros al tratarse de monedas que no son valoradas internacionalmente. Las tarjetas más importantes y reconocidas son Visa, American Express y Master Card. Deben ser las elegidas para cualquier viaje porque hay determinadas tarjetas que es más difícil que te admitan.

La seguridad que ofrecen: Ir con grandes cantidades en efectivo solo nos meterá en problemas. Siempre es recomendable tener una pequeña parte de dinero en la moneda propia de cada región para realizar los pagos en los establecimientos menos equipados como los mercadillos.

Alquiler de coche: Si pretendemos conseguir un coche de alquiler en nuestro destino, siempre nos solicitarán una tarjeta de crédito para formalizar el contrato. Si no disponemos de ella nos va a resultar imposible realizar la operación. Esta es una de las ocasiones en las que queda patente que el uso de tarjeta es imprescindible.

Pagos imprevistos: Aunque muchas veces llevemos todos los gastos calculados y fijados surgen incidentes, como ir a un hospital donde los costes son elevados. Aunque no tengamos liquidez en la tarjeta ésta nos permite disponer de una cantidad de crédito, que podremos pagar a plazos.

Ventajas que se convierten en necesidades: Existen países que directamente te exigen una tarjeta de crédito para hacer determinadas operaciones. Por ejemplo en Estados Unidos, a la hora de repostar en muchas de sus gasolineras, sin una tarjeta no lo conseguirás.

Perfectas para pagar. No tanto para retirar dinero

Cuando las ultimamos como medio de pago directo, nos evitaremos las comisiones que nos aplica nuestra entidad por cambiar de moneda y solo pagaremos las que corresponden a la propia tarjeta. Es verdad que si queremos sacar dinero en el extranjero las comisiones que tenemos que costear son altísimas.

Si por necesidad no podemos evitar retirar dinero en el extranjero seguimos teniendo opciones que resultan muy interesantes. La Tarjeta de débito de Evo Banco aparte de no tener comisión de emisión y renovación podrás disponer de dinero en cualquier cajero del mundo sin tener que pagar más por ello. Otra opción puede ser la Tarjeta de débito Citigold con la que estaremos exentos del pago de comisiones en la retirada de dinero de cualquier cajero. Para conseguir las dos tarjetas es necesario tener una mayor vinculación con la entidad, por lo que estamos obligados a contratar la cuenta corriente que cada una de ellas indique.

¿Una tarjeta es suficiente?

Aunque con una tarjeta ya tenemos prácticamente resuelto nuestro viaje, es recomendable llevar dos. Una de débito y otra de crédito. Precisamente porque tienen utilidades distintas, con la de débito nos podemos asegurar que no pagamos más de lo que nos hemos marcado y es perfecta para la retirada de dinero. Mientras que la de crédito nos salvará de cualquier aprieto en el que nos encontremos, por ejemplo a la hora de alquilar un coche te exigen una tarjeta de crédito y no de débito.

Dicho esto, se puede viajar perfectamente con una única tarjeta que nos cubra todas nuestras necesidades. En tal caso se elegirá una tarjeta de crédito porque tiene un mayor radio de acción y con una de débito nos podríamos quedar sin protección en algunos aspectos.