El Banco de Turquía ataja el desplome de las divisas de los emergentes

Las turbulencias que han azotado en las últimas jornadas los mercados de divisas y el desplome de la lira han movilizado al Banco de Turquía, que ha convocado una reunión de urgencia de su máximo órgano de Gobierno para este martes. El mero anuncio de la reunión ha permitido a la lira recuperar posiciones tras ceder un 4,4% la semana pasada. Asimismo, la expectiva de que este movimiento anticipe una respuesta por parte de los países afectados también ha ayudado a frenar la depreciación de las divisas de los emergentes bajo presión, aunque el mercado sigue bajo una elevada volatilidad.

Por países, la lira turca ha recuperado en un 1,9% su valor frente al dólar, mientras el rand sudafricano, que está en mínimos desde 2008, también ha remontado un 0,75%. A continuación, el real brasileño y el rublo han subido un 0,65% y un 0,59%, respectivamente. La rupia india, para acabar la ronda entre los emergentes, ha avanzado un 0,40%.

El peso argentino, protagonista por excelencia de los titulares, no ha cambiado su cotización este lunes coincidiendo con la entrada en vigor de la compra parcial de dólares en Argentina. Con ello, al menos ataja la fuerte depreciación de los días previos, un periodo en el que ha perdido un 13% de su valor frente a la divisa estadounidense. En cuanto al euro, la moneda única apenas se ha movido con respecto al viernes y cotizaba en 1,367 dólares.

Según informa el instituto emisor turco en un comunicado, en la cita de este martes se analizarán "los últimos acontecimientos y se tomarán las medidas de necesarias para garantizar la estabilidad de precios". Las eventuales decisiones que pueda tomar este organismo para afrontar la fuerte devaluación de su moneda será anunciada en la medianoche del mismo martes, añade el texto. La lira fue la segunda moneda que más se depreció durante las turbulencias de la semana pasada por detrás del peso.

Subida de los tipos

Sobre qué medidas puede tomar el Banco de Turquía, los analistas apuestan a una eventual subida de los tipos de interés en Turquía tras dejar sin cambios el precio oficial del dinero hace una semana. Los problemas, de hecho, venían de lejos, desde que hace un mes se desbordaron los problemas por corrupción en torno al primer ministro, Tarik Erdogan.Tras la decisión de mantener la tasa de referencia, el instituto emisor tuvo que intervenir en el mercado de divisas por primera vez en dos años y vender miles de millones de dólares, lo que tal y como ha quedado demostrado no fue suficiente para atajar el desplome.

“Se necesitará una subida dramática de los tipos para atajar la excesiva depreciación", advierte Ozlem Derici, economista de Deniz Invest en Estambul. Según sus cálculos, el Banco de Turquía tendría que subir la tasa de referencia en unos 200 puntos básicos frente al 5,75% actual. Otros analistas van más allá y especulan con un alza de hasta 300 puntos básicos (tres puntos porcentuales) y la imposición de controles al movimiento de capitales. "No convocas una reunión urgente y un comunicado a medianoche para anunciar medidas convencionales", ha resumido a Bloomberg George Magnus, de UBS.

Por encima de la situación turca, los analistas explican la depreciación de las divisas de países emergentes con la publicación de malos datos sobre manufacturas chinas, lo que alienta las dudas sobre la segunda economía mundial. También, a las incertidumbres sobre el impacto que tendrá en estos países el más que probable recorte del programa de estímulo de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED).