El juez imputa también por estafa al expresidente de Pescanova

El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha admitido parcialmente una ampliación de querella contra el expresidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, por un delito de estafa. Este auto se produce en respuesta a la querella presentada por el fondo estadounidense Cartesian, uno de los principales accionistas de Pescanova con el 5%, contra Novacaixagalicia, que fue quien le vendió las acciones de la multinacional pesquera.

El magistrado ya había imputado a Manuel Fernández de Sousa por falsear la cuentas anuales y abuso información relevante en el marco de la investigación del 'caso Pescanova', por el que ya declaró en la Audiencia Nacional el año pasado. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) suspendió la cotización de la multinacional pesquera el 12 y el 13 de marzo de 2013, después que la empresa no hubiera presentado las cuentas de 2012 y solicitó el concurso de acreedores.

En el auto el juez admite a trámite parcialmente la querella contra Fernández de Sousa y Joaquín Viña, director de relaciones con los inversores y responsable de consolidación del grupo Pescanova, ante los indicios del presunto conocimiento por ambos de la situación real, patrimonial y financiera del grupo y la participación que los mismos pudieran haber tenido en la venta de las acciones a Novacaixagalicia, "pudiendo albergar interés en el destino de tales participaciones a través de actuaciones que están siendo investigadas y que pudieran situarse al margen del influjo general ejercido por el mercado".

Para ello, se remite a la descripción en el escrito de ampliación de la querella de hasta cinco reuniones mantenidas por los responsables de la entidad compradora de las acciones con Fernández de Sousa y Viña en los meses previos a su inversión.

Asimismo, el juez desestima la petición de imputación de Novacaixagalicia al estimar que "no existen en las actuaciones indicios de que la entidad, sus consejeros y representantes conocieran "la verdadera situación económica de Pescanova" en el momento de la venta.

Además, señala que en la fecha de imputación de los hechos la entidad estaba sometida "a un amplio y complejo proceso de desinversión, previamente comunicado a la CNMV, al objeto de atender al plan de recapitalización de la caja, sobrevenidas tras su fusión".

El juez también indica que no puede sostener la imputación de Fernández de Sousa, Joaquín Viña y Novacaixagalicia de un nuevo delito de uso de información relevante "por cuanto el mismo se vincula a la venta de las acciones que tuvo lugar en mayo y junio de 2011", cuando "por el momento" no existen indicios de que conocieran en aquella fecha "la verdadera situación económica de Pescanova".

Fuentes de la defensa de Manuel Fernández de Sousa anunciaron a Europa Press que presentarán un recurso contra esta decisión al considerar que no se dan los supuestos para un presunto delito de estafa, "puesto que no produjo beneficio económico alguno para terceros en la venta de acciones de Novacaixagalicia a Cartesian".

Mientras, fuentes jurídicas mostraron "su sorpresa" ante el hecho de que, "sin haber realizado instrucción ni diligencias", el auto no contemple la imputación de varios consejeros de Novacaixagalicia y en cambio si acepte parcialmente la imputación del expresidente de Pescanova".

Por su parte, el bufete de abogados Yvancos&Abogados, que representa a la Plataforma de Afectados de Pescanova, ha celebrado en un comunicado esta imputación, ya que la investigación de los hechos "ha evidenciado que tanto Fernández de Sousa como Viña y otros consejeros conocían la situación real, tanto patrimonial como financiera de la pesquera".

Para el despacho de abogados, esta nueva imputación, así como la confirmación de las fianzas millonarias a algunos de los imputados, posibilitarán, cuando haya sentencia firme, la asunción de las responsabilidades civiles que respondan por los posibles delitos cometidos en la gestión de la empresa y permita recuperar las inversiones realizadas en la multinacional pesquera.