Deloitte augura nuevos máximos en la inversión extranjera directa en 2014

“¿Por qué invertir en España?”, fue la pregunta que Carlos Espinosa de los Monteros le hizo en 1976 a Henry Ford II, cuando su fabricante de coches planeaba instalarse en Valencia. El ahora Alto Comisionado para la Marca España ejercía entonces como consejero comercial en Chicago. Han pasado 37 años y Espinosa de los Monteros aún recuerda la respuesta del empresario estadunidense: “Porque tenemos confianza… en España hay 30 millones de habitantes y un potencial gigantesco”. Dos años después de ese encuentro (1978) la automotriz desembolsó 300 millones de dólares. En 2014, en medio de una crisis económica que llevó al país al borde del rescate, lograr esa misma confianza, considera la consultora Deloitte, será de nuevo la clave para que al cierre de este año los flujos de entrada de inversión extranjera directa (IED) superen los 40.000 millones de euros. de conseguirse esa cifra, que la consultora cree posible, supondría un nuevo récord para la economía española.

“Las empresas invierten cuando hay certeza. Y desde la primavera de 2013 ésta ha regresado, lo dicen los bancos de inversión, principalmente estadunidenses”, afirmó este martes Espinosa de los Monteros durante la presentación de un informe sobre la contribución socioeconómica de la inversión extranjera. “Algunos dicen que España ha vuelto”, destacó. De acuerdo con el Ministerio de economía, en 2008 la inversión extranjera alcanzó un máximo de 38.397 millones de euros. De enero a septiembre el dato apenas llegó los 13.050 millones de euros, un 33% menos que en 2012 cuando fue de 19.514 millones de euros.

“Algunos dicen que España ha vuelto” Carlos Espinosa de los Monteros, Alto Comisionado para la Marca España

La evolución mundial de la IED entre 2011 y 2012 refleja un descenso de un 18% En el caso de los países desarrollados el decremento superó el 32%. España experimentó un crecimiento de los flujos de dinero cercano al 3,5% y alcanzó la cifra de 27.750 millones de dólares (unos 21.350 millones de euros). Fernando Ruiz, presidente de Deloitte —empresa que elaboró el análisis—, confía en que los inversores apostarán con mayor fuerza en el país, gracias a que la prima de riesgo española (la diferencia de interés que exigen los inversores a los bonos a 10 años respecto a los más fiables de Europa, los alemanes) ha bajado de los 610 a los 200 puntos básicos.

A pesar de los pronósticos positivos, en el camino aún hay obstáculos por vencer según Deloitte, por ejemplo, la corrupción. “Los casos que se han presentado (entre la clase política y los empresarios españoles) son condenables y tienen un efecto negativo en el inversionista”, aseguró Espinosa de los Monteros. De acuerdo con el encargo de la Marca España, son los empresarios los principales embajadores del país. Respecto a la discusión sobre la independencia de Cataluña, sin embargo, considera que no es un tema que los inversores consideren preocupante. “Genera cierta inquietud, pero el mensaje que reciben es que no se va a producir la secesión”, subrayó.

Gustavo García Capó, coordinador del informe, afirmó que la inversión extranjera instalada, que en 2012 superó los 634.000 millones de dólares (463.4500 millones de euros), se traduce en la generación de más de 1.200.000 puestos de trabajo o en la presencia de más de 12.000 empresas de capital extranjero. En cuanto a la procedencia del capital, los países con mayor inversión en España son Italia, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania.

Los sectores económicos en los que se concentra la IED se concentran en la industria manufacturera, en el suministro de energía y en el comercio, al por mayor y menor, de repuestos de vehículos. “Habrá una mejora para el país, de manera evidente. La imagen que se tiene en España afuera es mucho mejor la que se tiene desde el interior”, agregó Fernando Ruiz, presidente de Deloitte.