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La deuda de Francia alcanzará el 95% del PIB durante el próximo año

El Gobierno anuncia ajustes por 15.000 millones y sube impuestos por otros 3.000 millones El objetivo es reducir el déficit al 3,6% a finales del ejercicio y alcanzar el 3% en 2015

Moscovici y el ministro de Presupuestos, Cazeneuve.
Moscovici y el ministro de Presupuestos, Cazeneuve.ERIC PIERMONT (AFP)

El Gobierno socialista francés ha dado a conocer este miércoles su proyecto de Presupuestos para 2014, que prevé que la deuda soberana aumente hasta un récord del 95,1% del PIB, un ahorro del gasto público “sin precedentes”, valorado en 15.000 millones de euros, y una subida de impuestos de 3.000 millones de euros.

París anunció que el año que viene emitirá deuda por valor de 174.000 millones de euros, con lo que la deuda pública global se situará en la cifra récord del 95,1% del PIB, alcanzando los 1,95 billones de euros, frente al 93,4% de este año. La deuda, que solo empezará a descender en 2015, era del 64 % del PIB en 2007, antes de que empezara la crisis.

Las empresas serán las grandes beneficiadas con ayudas fiscales para la competitividad

El ministro de Economía, Pierre Moscovici, reveló que el déficit bajará en medio punto durante 2014, para quedar en el 3,6% a finales de año y alcanzar en 2015 el 3% comprometido con Bruselas. El ministro se quejó en una entrevista a Le Monde que en Francia “no se habla de otra cosa que de los impuestos”, aunque admitió que el hartazgo de los contribuyentes ha alcanzado un punto de no retorno. La presión fiscal (suma de impuestos y tasas) será el año que viene del 46,1% del PIB, lo que sitúa a Francia justo por detrás de Bélgica, Suecia y Dinamarca.

La información sobre el presupuesto coincidió con el dato del paro registrado en agosto, que bajó en 50.000 personas, la primera reducción en dos años. Con este descenso, el número de parados en Francia era de 3,23 millones de personas, que se eleva a 4,7 millones si se amplía a los de actividad laboral reducida.

Sin "pausa fiscal"

El Gobierno programó en 2012 diversas subidas de impuestos para 2014, y finalmente ha tenido que renunciar a la "pausa fiscal" anunciada por el presidente, François Hollande, para cuadrar las cuentas. El Ejecutivo insistió en que la proporción ahorros-nuevos impuestos será de 80% a 20%, como querían Bruselas y el FMI, y recordó que la subida fiscal será diez veces menor que los 30.000 millones aumentados en 2013.

Las empresas serán las grandes beneficiadas, porque recibirán ayudas fiscales para mejorar la competitividad y crear empleo; a cambio, subirán las tasas a los particulares, y el tipo general del IVA pasará del 19,6% al 20% , mientras el tipo medio se situará en el 10%, frente al 7 % actual. El IVA de los productos de primera necesidad bajará del 5,5% al 5%.

Recortes por partidas

De los 15.000 millones de recortes, los mayores de la historia de Francia según el Gobierno, 9.000 millones corresponderán a la administración central y local, mientras los gastos sociales se verán cercenados en 6.000 millones. El Ejecutivo prevé controlar los gastos corrientes y reducir unos 2.000 puestos de funcionarios —se crearán 11.000 puestos para la educación, la justicia y la policía, pero se suprimirán 13.000 en otros ministerios—. En cuanto al gasto social, la seguridad social será la más afectada, con recortes de 2.400 millones.

Aunque Moscovici presumió de rigor presupuestario, también señaló que unas cuentas “demasiado austeras” hubieran frenado el incipiente y frágil crecimiento de la segunda economía del euro, que salió de la recesión en el segundo trimestre de este año, cuando creció un 0,5%. Para el próximo ejercicio, el Ejecutivo prevé un crecimiento del 0,9 % del PIB, frente al 0,1 % de este año. El Partido Socialista ha manifestado su intención de enmendar los Presupuestos en el Parlamento para introducir medidas en favor del poder adquisitivo de los más desfavorecidos.

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