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“El futuro de Xerox está en los servicios”

La presidenta de Xerox España, Paloma Beamonte, cree que la diversificación de la empresa es una de sus mayores fortalezas

Paloma Beamonte, presidenta y consejera delegada de Xerox España, en la sede de la compañía, en Madrid.
Paloma Beamonte, presidenta y consejera delegada de Xerox España, en la sede de la compañía, en Madrid.Álvaro García

Es un buen ejemplo de transformación y de adaptación a una economía en constante cambio. La historia de una compañía centenaria que pasó de fabricar fotocopiadoras a ofrecer todo tipo de servicios a las empresas: desde la configuración de sus impresoras hasta la gestión de sus recursos humanos. El gigante estadounidense Xerox, que emplea a 140.000 personas en 160 países, cumple 50 años en España. Paloma Beamonte (Madrid, 1968), presidenta y consejera delegada de la filial española, nos habla de un proceso de cambio que conoce bien, porque lo vivió desde el interior de una empresa en la que lleva 23 años.

Pregunta. ¿Sigue teniendo futuro la impresión?

El negocio de la impresión ya solo representa el 45% de la facturación

Respuesta. La oficina sin papel es un mito, pero creo que va a cambiar mucho la forma de imprimir, que se va a imprimir mucho más bajo demanda. Se va a progresar mucho en la movilidad, en la impresión desde dispositivos móviles, y eso va a conllevar mucha flexibilidad y la necesidad de poder usar cualquier impresora que se tenga cerca, y no tener que ir a una en concreto. No nos podemos enfrentar a esa tendencia, sería ridículo.

P. ¿Cómo ha afectado la digitalización de documentos a su negocio?

R. El negocio está cambiando. Está cambiando la forma de imprimir, pero no se está dejando de imprimir. A nivel mundial todavía sigue creciendo el número de impresiones hechas en todas las tecnologías. Es cierto que la impresión digital, que es donde nosotros trabajamos, supone una parte muy pequeña, entre el 2% y el 7%. Hay otras formas tradicionales que conllevan mucho más volumen de impresión, que sí están sufriendo mucho la reducción de la actividad. Nuestra tecnología es, sin embargo, para el uso cotidiano de la oficina y también para tiradas cortas: unos pocos libros, unas pocas revistas, etcétera. Como las empresas quieren ahorrar, acortan sus tiradas y nosotros estamos creciendo también en ese negocio. En conjunto, no estamos sufriendo la crisis tanto como puede parecer desde fuera.

P. ¿Cómo se ha adaptado Xerox a ese cambio?

Las compañías quieren dos cosas: imprimir menos y a un menor precio

R. Las compañías quieren dos cosas: imprimir menos y a un menor precio. Por eso, nuestra división de consultoría procura ayudar al cliente a reducir su coste total de impresión. Hacemos, por ejemplo, cosas tan sencillas como predeterminar una máquina para que siempre imprima a doble cara, o contabilizar las impresiones realizadas por los empleados para que reduzcan el número de copias que hacen. También recomendamos dispositivos con un coste más efectivo. Todo esto hace que podamos decirle al cliente una frase que me gusta mucho: si dejas de imprimir, deja de imprimir con Xerox.

P. La industria de la impresión usa algunos elementos contaminantes, como el tóner. ¿Qué importancia le da su empresa al respeto del medio ambiente?

R. Tenemos una mentalidad permanente de sostenibilidad. Hemos invertido mucho en desarrollar tecnología que permita imprimir sin generar residuos tóxicos e incluso hemos desarrollado tecnología de tinta sólida que se puede tirar directamente a la basura. Seguimos investigando para reducir nuestro impacto sobre el medio ambiente con, por ejemplo, el uso de cartuchos de tinta que se puede borrar para que el papel sea reutilizable.

P. Xerox vivió un cambio importante que le llevó a diversificar su negocio desde la impresión a otras actividades. ¿Cómo fue ese proceso?

Muchas compañías subcontratan procesos por la crisis, y eso nos favorece

R. Hace 15 años empezamos a desarrollar nuestra división de servicios, Xerox Global Services. Al principio todo estaba muy relacionado con la impresión. Nos encargábamos de los servicios de impresión, de digitalización y también de la gestión de contenidos. En 2010 compramos Affiliated Computer Services, una empresa muy fuerte de externalización de procesos empresariales, que se dedica a subcontratar servicios financieros, de recursos humanos, de gestión de facturas entrantes, de gestión de transportes, etcétera. Y eso nos dio mucho crecimiento y nos permitió entrar en otro tipo de mercado.

P. Y después de ese cambio, ¿cuál es el futuro?

R. El futuro de Xerox está en los servicios, y dentro de estos, la impresión será uno más. Hoy, los servicios suponen el 55% de la facturación de Xerox a nivel mundial [cerca de 23.000 millones de dólares en 2012, 17.193 millones de euros] y la impresión, el 45%. El segundo trimestre de 2013 ha sido el primero en el que el peso de los servicios ha superado al de la tecnología de impresión. Estamos teniendo buenos resultados porque tenemos una estrategia de diversificación muy fuerte que ya se ha materializado.

P. ¿Cómo ha afectado la crisis económica a su compañía?

R. Con la bajada de su facturación, todas las empresas tienen que mirar sus líneas de gastos para mantener su rentabilidad. En ese sentido, hemos tenido que revisar muchos contratos actuales para ser más efectivos y ofrecer el menor coste al cliente. Allí hemos desarrollado toda la línea de consultoría. Le decimos, por ejemplo, a una empresa cuáles son sus dispositivos menos rentables y le recomendamos que los retire. Es cierto que la crisis ha hecho que la gente se gaste menos en imprimir y que eso nos ha afectado a nosotros y a todo nuestro mercado. La parte de servicios es la que menos sufre la crisis porque hay muchas compañías que subcontratan lo que no supone su negocio principal y eso nos favorece.

P. ¿Sigue la compañía una estrategia específica en España?

R. Xerox sigue una estrategia global que se localiza en algunos mercados. Trabajamos en tres grandes áreas: Estados Unidos, Europa y otros mercados en desarrollo. Y luego está toda la gran zona de Asia, que cubrimos con una joint venture entre Fuji y Xerox. Tenemos un modelo muy similar en Estados Unidos y Europa, y en los mercados en desarrollo es quizá donde nos adaptamos más, porque tenemos una presencia incipiente. Esto es así porque, cada vez más, lo que te diferencia del resto es la globalidad. Podemos prestar el mismo servicio de consultoría de ahorros de costes a la central de una compañía y a todas sus delegaciones a nivel mundial. Eso te lo puede dar un proveedor que tenga una organización muy parecida en todos los países.

P. ¿Cómo ve la situación económica de España?

R. Las grandes empresas están recuperando ritmo de actividad, se han internacionalizado y empiezan a sacar beneficios de ello. Las pymes tienen, sin embargo, problemas de liquidez aunque sean rentables, y además su tamaño les impide acudir a mercados donde sí hay crecimiento, a diferencia de las grandes. Nosotros somos testigos de esas dificultades. Tenemos una empresa de renting —alquiler de bienes para empresas—, pero cuando un cliente no quiere alquilar nuestro material y acude a sus proveedores habituales, suele tener muchos problemas para conseguir crédito.

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