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Ibercaja pierde 485 millones en 2012 tras sanear sus activos inmobiliarios

La entidad obtiene 433 millones con la venta de inmuebles y con acuerdos de seguros. El resultado antes de las provisiones asciende a 747 millones.

Íñigo de Barrón

Ibercaja ha cerrado un ejercicio difícil, probablemente uno de los más complicados de sus 137 años de historia. La cuenta de resultados presenta unas pérdidas de 485 millones, frente a los 54 millones logrados en 2011. La razón de esta situación es la necesidad de sanear el balance, sobre todo los activos inmobiliarios. Esta depuración de los créditos se ha hecho realizando provisiones con las  que cumplir con la nueva legislación: los dos decretos para la provisión del ladrillo, así como las exigencias de capital adicional requeridas por la consultora Oliver Wyman en septiembre pasado. El conjunto de las provisiones ha ascendido a 1.433 millones euros, 6,8 veces más que en 2011.

La entidad considera que en 2012 "ha logrado su objetivo prioritario: consolidarse entre el grupo de entidades bancarias más sanas del país y sin haber recibido, en ningún momento de la crisis, ayudas públicas", dice en un comunicado.

La caja aragonesa, que negocia la adquisición de otra entidad, Caja3, argumenta que fue "un ejercicio especialmente complicado para el sector financiero, caracterizado por la recesión económica, el descenso de la actividad y los profundos cambios regulatorios, Ibercaja ha acreditado la fortaleza de sus ingresos recurrentes que, sumados a los ingresos extraordinarios destinados a cubrir las necesidades de capital". Antes de los saneamientos, la entidad había ganado 748 millones, un 163% más que en 2011.

El conjunto de las provisiones asciende a 1.433 millones, 6,8 veces más que en 2011

Para hacer frente a las provisiones, Ibercaja ha generado ingresos extraordinarios por 433 millones. En estas operaciones extraordinarias se incluye la cesión de la depositaría de fondos de inversión y planes de pensiones a CECA, la recompra de deuda subordinada y otras emisiones mayoristas, el acuerdo de exclusividad con CASER para la distribución de seguros generales (no vida) y la operación de venta y alquiler de medio centenar de inmuebles de uso propio. "El saneamiento de los activos inmobiliarios en un solo ejercicio, se ha realizado cumpliendo íntegramente con las exigencias de los Reales Decretos y sin recurrir a la venta de ningún activo estratégico", afirma la entidad.

Su ratio de capital se situó en un 10,4%, por encima del 9% exigido, y la morosidad en el 5,48%, casi la mitad que la del sistema, el 10,4%.

El crédito de los clientes, y la actividad de leasing, ha descendido un 5,17%, mientras que los recursos de clientes han caído un 2,86%. En conjunto, el volumen de actividad ha bajado un 4,02%, según los datos de Ibercaja. 

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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