Iberia convoca a los sindicatos en la tercera jornada de la huelga

Ayer no se repitieron las cargas policiales del lunes, ni la entrada de miles de manifestantes en la terminal 4 del aeropuerto de Barajas. Sin embargo, pese a su tranquilidad, la jornada no pudo ser considerada normal. Iberia canceló 76 vuelos, además de los 80 anulados por Air Nostrum, 79 de Vueling y 20 de Iberia Express, en el segundo día de huelga de los cinco convocados hasta el próximo viernes. Iberia respondió a la llamada al diálogo del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, convocando a los sindicatos de tierra y al de los tripulantes de cabina (TCP) a una reunión a las 12.30 de hoy.

Para este miércoles, la aerolínea ha cancelado 86 vuelos, mientras Air Nostrum ha anulado 88, Iberia Express, 19, y Vueling dejará en tierra 64 de sus servicios. Para toda la semana están previstas un total de 1.200 cancelaciones. De ellas, 415 corresponden a Iberia, 354 a Vueling, 357 a Air Nostrum, y 96 a Iberia Express.

El pulso entre empresa y trabajadores, causado por los planes de Iberia para despedir a 3.800 empleados (19% de la plantilla), se antoja insostenible. Según los sindicatos, ayer se sumaron el 90% de los 20.000 empleados llamados a secundar la huelga. De ahí que Soria, hiciera ayer un llamamiento tanto a la dirección como a los sindicatos "para que se sienten y adopten un acuerdo" que ponga fin a una huelga que "perjudica muchísimo al sector turístico español y a la imagen de España".

La "normalidad" de ayer consistió en más de 30 furgones de la Policía Nacional estacionados a las puertas de la T4. En el interior, centenares de agentes patrullaban las instalaciones y se aseguraban de que a los empleados de Iberia tan solo se les permitiera el acceso a la zona "no pública" con la carta de servicios mínimos, mientras que a los pasajeros se les solicitaba la tarjeta de embarque para acceder a algunas zonas de la terminal.

A los que se iban, atravesando la muralla policial, se sumaban los viajeros que no sabían que se quedaban y se concentraban ante los mostradores de Iberia tras haber conocido que su vuelo había sido cancelado. Todo ello con la música de fondo provista por cientos de manifestantes coreando durante horas "¡Iberia unida jamás será vencida!" y "¡Uno, dos, tres mañana otra vez!".

Por cada día de paro la aerolínea española, que se fusionó el 8 de abril de 2010 con la británica British Airways para formar International Airlines Group (IAG), pierde tres millones de euros.

El de ayer solo fue el segundo día de paro de los 15 convocados hasta el próximo viernes 22 de marzo. Además, a las huelgas del mes que viene, entre los días 4 y 8 y el 18 y 22, se sumará el sindicato Sepla de pilotos.