Emilio Botín pide que los cambios en la Ley Hipotecaria sean temporales

El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha pedido hoy que cualquier cambio que se vaya a introducir en la Ley Hipotecaria sea "temporal y transitorio".

Botín hizo esta petición en la presentación de los resultados obtenidos por la entidad en 2012, cuando ganó 2.205 millones de euros, el 59 % menos que un año antes debido al gran esfuerzo realizado en dotación a provisiones para sanear su exposición al ladrillo en España.

Según explicó ayer en el Congreso el ministro de Economía, Luis de Guindos, el Gobierno prevé limitar a 30 años el plazo máximo de las hipotecas y elevar a tres años la duración de los alquileres del Fondo Social de Viviendas, dentro de un paquete de medidas para proteger a los colectivos más vulnerables.

Estas medidas afectarán a la Ley Hipotecaria, la Ley de Regulación del Mercado Hipotecario y a la Ley de Enjuiciamiento Civil, además de otras que hacen referencia al Código de Buenas Prácticas aprobado en marzo.

Para Botín el sistema hipotecario de España "funciona muy bien", ya que existe una cultura de pago hipotecario muy arraigada que hace que "el 97 % de las hipotecas que hay se pagan".

También se refirió a la iniciativa lanzada por la entidad en 2011 para ayudar a sus clientes hipotecados con problemas, una moratoria hipotecaria con la que benefició a 21.000 clientes hasta finales de 2012, explicó.

"Nosotros hemos tomado medidas" y hemos atendido a 21.000 familias" que no podían hacer frente a sus deudas con refinanciaciones, recordó.

Las medidas que se tomen ahora, insistió, "deben ser excepcionales y transitorias" y la recuperación debería comenzar en el 2013 o 2014.

"En el Santander lo tenemos muy claro -dijo Botín- el desahucio es la última y peor opción para todos: para nuestros clientes y también para el banco".

Sobre las ventas de inmuebles realizadas en 2012, que superaron las 33.000, recordó que se hicieron con un descuento medio del 50 %, y explicó que tienen unos 800 millones de euros reservados para provisionar el riesgo inmobiliario que aún tienen en balance, que asciende a 12.000 millones de euros.

"Lo que queda lo iremos sacando al mercado en 2013 y 2014", explicó Botín, que añadió que "no creo que sigamos haciendo esos descuentos "porque ya estamos en el tope", así que no les influirá lo que pida el mercado ni tampoco lo que haga la Sareb, el llamado "banco malo".