Lonmin se dispara en Bolsa tras el acuerdo con los mineros en Sudáfrica

El grupo Lonmin, tercer productor mundial de platino con sede en Reino Unido, ha abierto la jornada en fuerte alza en la Bolsa de Londres tras la firma de un acuerdo con los mineros en Sudáfrica, que pone fin a más de un mes de conflicto, que ha causado más de 40 víctimas.

Esta mañana los títulos del grupo subían un 8,99%, hasta los 708,4 peniques. El acuerdo firmado el martes por la noche, después de más de tres semanas de difíciles negociaciones, prevé un aumento de sueldo. Lonmin ha propuesto un incremento de las retribuciones de entre un 11% y un 22% para los trabajadores de la sede de Marikana, en el norte del país, donde la policía mató a 34 manifestantes el pasado 16 de agosto. Los mineros recibirán además un extra de 2.000 rands (190 euros) si se reactiva la actividad de extracción a partir de mañana jueves.

Apenas un día antes de la firma del acuerdo, el grupo tuvo que revisar a la baja sus objetivos de producción por el impacto de la huelga. La compañía, que cotiza en Londres y en Johannesburg, rebajó sus ventas hasta las 685.000-700.000 onzas de platino hasta el cierre del ejercicio el próximo 30 de septiembre, frente al anterior objetivo de 750.000 onzas.

Las protestas han causado una caída del rand, la moneda local, de un 3,3%

Los inversores extranjeros, preocupados por la extensión del conflicto, han retirado participaciones en la industria de extracción de platino en el país. La crisis, la mayor en Sudáfrica desde el final del Apartheid, levanta temores por una degradación del crédito y ha causado la pérdida de valor del rand, la moneda local, del 3,3% la semana pasada. Pese a que parte de las participaciones retiradas por los inversores extranjeros ha sido sustituida por inversores locales, todavía existe un fuerte riesgo para la actividad minera de la zona, sede del 80% de las reservas de platino a nivel mundial.

El Gobierno sudafricano había tildado la huelga de grave amenaza al crecimiento económico del país, acusándola de minar la confianza de los inversores y profundizar la crisis de un sector ya muy afectado por la caída de demanda.

El conflicto salarial de Marikana arrancó el pasado 10 de agosto con una violenta manifestación en la que participaron alrededor de 3.000 trabajadores, sobre un total de 28.000 asalariados del sito de extracción de platino. En los primeros dos días, los enfrentamientos con la policía causaron al menos diez muertos.

La violenta respuesta de las fuerzas del orden del 16 de agosto desencadenó protestas en otras minas, que se sumaron a la huelga, provocando el paro de la producción de la mayoría de los centros de la región de Rustenburg (en el norte), uno de los principales motores de la economía del país.