Gas Natural se globaliza
La empresa refuerza su expansión internacional en Latinoamérica, India y EE UU
Dos contratos excepcionales, uno para abastecerse de gas natural licuado suscrito hace siete meses con el grupo estadounidense Cheniere y otro de suministro de ese mismo tipo de gas al grupo indio Gail firmado hace unos días, impulsan el cambio de modelo de negocio y el acelerado proceso de globalización emprendido por Gas Natural Fenosa (GNF) al amparo de su plan estratégico hasta 2014 elaborado tras la integración de la eléctrica en la gasista. La internacionalización, que le está permitiendo salvar sus resultados pese a la crisis que se vive en España, le aporta ya, con datos a 30 de junio, el 42% del resultado bruto de explotación (10 puntos más que hace un año) y el 30% de sus ventas totales (desde junio de 2011, la facturación en el exterior de GNF ha crecido un 44,5%).
Gracias a la internacionalización y al negocio del gas, señalan en la compañía, el grupo de gas y electricidad obtuvo en la primera mitad del año un resultado bruto de explotación de 2.559 millones, un 7,3% más que en el primer semestre de 2011. Su beneficio neto, sin embargo, cayó un 6,7%, situándose en 767 millones, pero superó las previsiones de los analistas, que esperaban un descenso del 15%. La compañía atribuye la disminución del beneficio a la menor aportación de plusvalías por ventas de activos contabilizadas en la primera mitad de este ejercicio respecto al anterior y asegura que, ajustando esas plusvalías, el beneficio neto crece un 24,3%.
A las compraventas de grandes cantidades de gas natural licuado, GNF suma en los mercados internacionales el crecimiento registrado en el primer semestre en sus otros negocios vinculados al gas y la electricidad (producción, distribución y comercialización, logística y transporte, y construcción y explotación de infraestructuras). El grupo está presente ya en 25 países; cuenta con 20 millones de clientes; es operador gasista de referencia en las cuencas atlántica y mediterránea, con un volumen de 30 bcm (30.000 millones de metros cúbicos), y es uno de los mayores operadores de gas natural licuado (GNL) a través de sus participadas Stream y UF Gas, en las que cuenta con una flota de 11 buques metaneros.
El desafío de Repsol
La multinacional tiene una baza más en estos momentos para ampliar su presencia exterior: los activos de gas natural licuado en Canadá, Perú y Trinidad Tobago puestos a la venta por Repsol. Gas Natural Fenosa ha analizado en las últimas semanas, como adelantó a los analistas su consejero delegado, Rafael Villaseca, la posibilidad de presentar o no una oferta. La decisión, que ampliaría la dimensión exterior de GNF, está a priori condicionada por el precio de los activos (la petrolera quiere ingresar por ellos entre 2.000 y 3.000 millones), por el elevado endeudamiento del grupo y por la posición no siempre armónica de sus dos mayores accionistas (Repsol, que tiene el 30% de su capital, y La Caixa, que cuenta con el 36% de la gasista y con el 12,8% de la petrolera).
Repsol, según Reuters, tiene desde el lunes ofertas no vinculantes de GNF y de otros cinco grupos (la china Sinopec, las rusas Gazprom y Novatek, British Gas y la francesa GDF Suez). La oferta de Gas Natural Fenosa, sin embargo, según fuentes cercanas a la transacción, es muy limitada en términos económicos.
Al cierre de agosto, Gas Natural Fenosa ha dado un salto cuantitativo y cualitativo en su internacionalización gracias a su asociación con el grupo indio Gail, que es el mayor operador de gas en su país. El acuerdo, sellado con el mayor contrato logrado por GNF en esta región, prevé que la empresa española suministre a Gail, desde enero y durante tres años, 3 bcm (3.000 millones de metros cúbicos, que equivalen al 10% de la demanda anual del mercado español) de gas natural licuado. Este contrato, de un importe próximo a los mil millones de euros, refuerza la posición de Gas Natural Fenosa como comercializadora de gas en el Pacífico y supone un paso importante en su estrategia de crecimiento y diversificación en mercados de gran potencial como es el caso de India. Además del contrato de suministro, ambas compañías han suscrito un acuerdo de colaboración industrial con el fin de estudiar el desarrollo conjunto de proyectos energéticos en India y en terceros países. Analistas de Inverseguros y Bankia han destacado en sus comentarios las bondades de esta operación.
Más relevancia tiene aún para GNF —es su mayor contrato de aprovisionamiento hasta la fecha de gas natural licuado— el acuerdo suscrito en noviembre pasado con Cheniere. La estadounidense le va a suministrar a partir de 2017, con libertad de destino y a lo largo de 20 años, 5 bcm anuales de GNL (el equivalente al 15% del consumo del mercado español). El contrato, según la compañía española, marca un hito en su historia, ya que por primera vez va a recibir gas natural de EE UU y va a poder comercializarlo además “en las cuencas del Atlántico y el Pacífico, una vez esté operativa la ampliación del canal de Panamá, ya que no tiene ninguna restricción de destino”.
Más recientemente, en abril, la empresa española ha iniciado el suministro de gas natural a la Autoridad de la Energía Eléctrica (AEE) de Puerto Rico, con quien ha firmado un contrato para aprovisionarle 2 bcm (2.000 millones de metros cúbicos) durante los próximos dos años. Es el primer contrato de aprovisionamiento de gas natural suscrito por Gas Natural Fenosa en Puerto Rico, país en el que está presente desde 2003 a través de la compañía EcoEléctrica, de la que posee el 47,5%, que cuenta con una central de ciclo combinado y una planta de regasificación.
Latinoamérica es responsable de casi dos de cada tres euros de la aportación al Ebitda de Gas Natural Fenosa de sus actividades internacionales, que suponen el 42% del total. En distribución de gas, en el primer semestre, Argentina, Brasil, Colombia y México han sumado una cifra neta de negocio de 1.377 millones, un 7,2% más que en la primera mitad de 2011. Y en distribución eléctrica, Panamá, Nicaragua y Colombia han tenido en conjunto una cifra de negocio neta de 1.230 millones de euros en el primer semestre, un 3,3% más que en 2011.
Crecimientos a los que hay que añadir la expansión registrada por el grupo de gas y electricidad en Europa. Su filial de comercialización, Gas Natural Europe, logró en mayo la mayor adjudicación en el concurso de suministro de gas natural de la región de París y dará servicio durante los próximos dos años a instalaciones públicas de 208 municipios del área de la capital francesa. GNF ha abierto también en los últimos tiempos oficinas de comercialización en Holanda y Alemania, y en el mercado portugués es ya el primer operador independiente, con una cuota del 15% en el segmento industrial. En Italia, su filial Gas Natural Distribuzione cerró a principios de año la adquisición de la firma Favellato Reti, que le aportó concesiones de gas en 28 municipios.
La debilidad del mercado doméstico y las incertidumbres sobre cambios normativos y regulatorios en España constituyen hoy el mayor lastre para los resultados y la cotización de Gas Natural Fenosa. Su endeudamiento financiero neto sigue siendo elevado, 16.929 millones, aunque ha sufrido una drástica reducción en los últimos años, y se hubiera situado en 15.872 millones a 30 de junio, según la compañía, si se descontase el déficit de tarifa pendiente de recuperar. La vida media de esta deuda son cinco años, y el 77% del total vence a partir de 2015.
Gas Natural, que ha colocado esta misma semana una emisión de bonos de 800 millones de euros con vencimiento en enero de 2020 que va a destinar a refinanciar deuda, contaba al cierre del primer semestre con una liquidez de 8.841 millones de euros, entre efectivo y líneas de crédito.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.