La ‘licencia express’ podrá extenderse a tiendas de más de 300 metros cuadrados

El Gobierno quiere extender una “alfombra roja”—palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría— a los emprendedores que abran un negocio. Desde ayer, una pequeña o mediana empresa, un autónomo o una gran compañía —o cadena— podrá abrir negocio el día después de haber presentado una declaración de apertura (“declaración responsable”), haber pagado las tasas correspondientes y adjuntar, en su caso, un visado de las obras realizadas. Simple y rápido. Ya no serán necesarias las dos licencias tradicionales, de actividad y de apertura, cuya tramitación, en algunos casos, podía extenderse hasta un año y medio.

El Real Decreto aprobado ayer está dirigido a empresas del sector comercial minorista y de determinados servicios “con establecimiento permanente, en cualquier parte del territorio nacional y cuyo umbral de superficie de venta y exposición al público no supere los 300 metros cuadrados”, como carnicerías, panaderías, tiendas de ropa o peluquerías. Pero, según aclaró la vicepresidenta, es un “mínimo común denominador”, que podrá ser ampliado. En un año, se revisarán resultados y se analizará si la medida se extiende a locales de mayor tamaño y a otras actividades, como bares y restaurantes.

El comunicado del Gobierno es claro: “el Estado” señala “mediante desarrollo reglamentario, y las Comunidades Autónomas podrán ampliar el catálogo de actividades incluidas en la norma así como el umbral de superficie aplicado. Estas últimas podrán ampliar asimismo el catálogo de obras que no precisen licencia”.

La eliminación de trabas burocráticas beneficiará no solo a los negocios futuros sino a aquellos que en este momento se encuentren tramitando licencias municipales para la apertura.

Según el Ejecutivo, la simplificación de trámites no afectará a la seguridad ni facilitará la picaresca. Al contrario, señala, el decreto aprobado “garantiza los controles a posteriori a fin de verificar el cumplimiento estricto de la legalidad administrativa y no merma en forma alguna los controles administrativos de comprobación, inspección y sanción”.

Con 436.496 empresas, 606.131 locales y 1,8 millones de empleos que suponen el 5% del total de valor añadido bruto, el sector comercial minorista constituye un sector estratégico. España ocupa el puesto 133 en una lista de 183 países por los trámites que es necesario cumplimentar para abrir un negocio según el estudio Doing Bussiness 2012 del Banco Mundial. Tanto la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) como las grandes superficies manifestaron su satisfacción por la medida aprobada.