El despacho jurídico Ramón Hermosilla presenta su marca global Ontier

Un artesano imprime su sello personal en cualquier de los trabajos que ejecuta. La primera idea que viene a la cabeza al referirse a este tipo de labores es la de un alfarero, un cestero o un orfebre. Pero el concepto está cambiando. O eso es lo que pretenden desde el despacho de abogados Ramón Hermosilla & Gutiérrez de la Roza (RHGR) con la presentación de la nueva marca global jurídica denominada Ontier. "Queremos ser artesanos del derecho", asegura su primer presidente y socio de RHGR, Adolfo Suárez Illana.

El bufete madrileño lidera la puesta en marcha del despacho internacional que integrará negocios de diez países. Además de España, Ontier engloba bufetes de Reino Unido, Portugal, China, Brasil, México, Venezuela, Colombia, Paraguay y Bolivia. Su eslogan será El primer despacho global con alma local. "El eje fundamental serán las personas; queremos que sean grandes juristas en su ámbito geográfico y que estén muy cerca del cliente, que le tengan apego", explica Suárez Illana.

El pistoletazo de salida de Ontier, de capital mayoritariamente español, se dará el próximo lunes en Madrid. Los dirigentes de los diez despachos que se embarcan en la aventura celebrarán una convención en la capital. El arranque oficial se produce ahora, pero su gestación se inició hace años después de descartar otras formas de internacionalización. "Con este modelo, cada uno se desprende de parte de su soberanía y se integra en la marca de una forma muy completa: desde el punto de vista accionarial, de procesos de selección de clientes, de chequeo del conflicto de intereses así como de controles de calidad, facturación, cobro y satisfacción del cliente", señala su presidente.

El trato directo y personal será, según Suárez Illana, la directriz básica de Ontier, nacido de la necesidad de profundizar en la relación con diversos bufetes distribuidos por la geografía mundial. "Si a un cliente le surge un conflicto en otro país, no es lo mismo remitirle a un despacho que tú conoces que a uno que tiene tu mismo nombre. La confianza será mayor en el segundo caso", apunta Suárez Illana. La consolidación es el primer objetivo del nuevo conglomerado, aunque la experiencia acumulada les permite mirar más allá y apostar por el crecimiento desde el principio. Estados Unidos, India y algunos países de África están en el punto de mira de Ontier.

La plantilla del bufete internacional está compuesta por 500 personas, aunque se espera que el nuevo proyecto integre poco a poco a más trabajadores. "Necesitamos renovar y necesitamos también gente nueva", señala Suárez Illana. Ontier nace sobre unos pilares asentados y con toda la confianza puesta en unos particulares artesanos, "los artesanos del derecho".