El Gobierno alemán dice que España ha hecho grandes esfuerzos contra el déficit

La ofensiva diplomática del Gobierno español en Bruselas se ha basado en una doble vía: cortejar a la Comisión Europea para que el desafío del presidente Mariano Rajoy tras la pasada cumbre no pase una excesiva factura, y convencer a Alemania de que a pesar de que las cifras de déficit se dispararon en 2011, los recortes se han puesto en marcha y el compromiso de España con la austeridad y las reformas es total. Para el segundo fin, el ministro de Economía, Luis De Guindos, se reunió ayer con su homólogo alemán, Wolfgang Schäuble, y según afirmó este último a su entrada en el Eurogrupo, con un relativo triunfo. "España ha hecho un gran progreso", ha asegurado Schäuble dejando en un segundo plano el hecho de que el Gobierno español pretende incumplir el objetivo de déficit este año para no agravar la recesión. Frente al apoyo alemán, no hubo tanto éxito en la medida en que los ministros de Finanzas del euro condenaron a España a un ajuste de 5.000 millones más.

El propio Guindos reforzó el mensaje de Schäuble al asegurar que Alemania "valora lo que está haciendo España: el esfuerzo en las reformas estructurales y en el ajuste fiscal". El titular de Economía anfatizó que lo que valora especialmente el ministro alemán es el compromiso español de alcanzar la meta de un déficit del 3% del PIB en 2013. Esta idea apuntala la interpretación que hace el Gobierno español del cumplimiento de los compromisos europeos: lo importante es llegar a lo establecido para 2013.

"Ha sido una reunión extremadamente abierta y agradable", ha asegurado Guindos a su llegada a la reunión posterior, del Eurogrupo. En el encuentro bilateral mantenido antes de la reunión de todos los ministros de finanzas de la zona euro, Schäuble ha trasladado a su homólogo español el respaldo alemán a los esfuerzos que está haciendo España por corregir los desequilibrios del año pasado el déficit alcanzó el 8,5% del PIB frente al 6% previsto- y los sacrificios adicionales que se requerirán para dejarlo este año en el 5,8% que ha establecido el Gobierno, por encima del 4,4% comprometido ante Bruselas.

El propio Rajoy ha estrechado los contactos con la canciller alemana, Angela Merkel, en las últimas semanas. Y Alemania ha mantenido una escrupulosa neutralidad para con el requerimiento español de flexibilizar las metas fiscales este año para cumplir con el 3% del déficit el año próximo. Fuentes diplomáticas aseguran que tanto Berlín —que ha dado sobradas muestras de implacable ortodoxia en otros casos, como el griego— como París son favorables a los objetivos del Ejecutivo español, siempre que España concrete las razones de la desviación del déficit en 2011 y las medidas aplicadas para reducir el agujero.

Al igual que ha hecho hoy con el ministro alemán, Guindos reveló que también se ha reunido con los responsables de Economía de otros países, entre ellos Francia. "Hay que tener en cuenta que la desviación el año pasado fue de 2,5 puntos y que las circunstancias del crecimiento, además, han cambiado", justificó Guindos antes de destacar que ha hallado comprensión entre los socios comunitarios. El propio presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, quien sorprendió al ministro español con un peculiar saludo agarrándole primero del cuello para acabar fundiéndose en un abrazo con él, se mostró aparentemente en sintonía con esta posición. "Asumimos que España puede y quiere alcanzar los objetivos de déficit en 2013", aseguró Juncker antes del Eurogrupo, que finalmente, fijó un nuevo objetivo de déficit del 5,3% para España.