Mañana bajan de nuevo las llamadas de móvil cuando se viaja a la UE

Europa no anda bien y hasta su moneda, el euro, está cuestionada. Pero al menos sirve para algo: para bajar las tarifas del móvil. Hace tres años, la Comisión Europea, ante la pasividad de las respectivas autoridades nacionales se propuso pararle los pies a las compañías de telefonía móvil que cobraban tarifas abusivas por las llamadas y los mensajes que se hacen o se reciben cuando se viaja a algún país de la Unión. Así que desde 2009, las llamadas en itinerancia o roaming bajan cada año, coincidiendo con el 1 de julio. Desde 2006, los precios se han reducido a una cuarta parte como media.

Mañana, 1 de julio, entra en vigor una nueva rebaja. El precio de las llamadas que se hagan desde otro país de la Unión Europea pasa de 39 céntimos a 35 céntimos por minuto (incluyendo el establecimiento de llamada), como máximo. Y también baja para las llamadas recibidas: de 15 céntimos a 11 céntimos por minuto. El precio de enviar mensajes de texto (SMS) permanece invariable en 11 céntimos por mensaje. Tampoco varía el precio de recibir en itinerancia un SMS, que siguen siendo gratuitos. Aunque hay que tener cuidado con las notificaciones vía mensaje, sobre todo las que avisan de un nuevo mensaje al buzón de voz: recibir el SMS es gratis pero escuchar el mensaje de voz en el contestador, no.

En todos los casos, se trata de precios máximos autorizados, pero las compañías pueden rebajarlos aún más. De hecho, casi todas ellas tienen planes especiales para los abonados que viajan a la UE, pero hay que solicitarlos antes del viaje.

También se reduce el tráfico de datos (conexión a Internet, bajada de música, imágenes, etcétera), y desde el 1 de julio se establece un máximo de 50 céntimos de euro por megabyte subido o bajado (antes era de 0,80 euros por megabyte). Además, y lo que es casi más importante, desde el año pasado, el límite que nos pueden cobrar por conectarnos a Internet con roaming quedó fijado automáticamente en 50 euros sin IVA (a menos que el usuario expresamente elija otro límite).

Dada la generalización de los smartphone (teléfonos inteligentes) y tabletas que permiten la conexión a Internet, muchos usuarios se traían de sus viajes por la UE una sorpresa desagradable en forma de una factura por conexión a datos que a veces superaba los 10.000 euros. Para evitar esos sustos la UE impuso límites de consumo

Para quien viaje a la UE, hay que tener en cuenta que los operadores también deben enviar a sus clientes un mensaje informándolos de las tarifas de los datos en itinerancia cada vez que entren en otro país de la Unión. Y avisar a los clientes, con un mensaje de alerta, cuando alcancen el 80% de su límite fijado. Estas alertas se pueden enviar mediante mensajes de texto, correo electrónico o ventanas emergentes en las pantallas de los ordenadores, a elección del operador y según el dispositivo utilizado.

Una de las principales preocupaciones para los ciudadanos que viajan por el Viejo Continente es su factura de móvil. La última encuesta de la Comisión Europea de 2010 señalaba que a un 75 % de los europeos les preocupa el coste de usar el teléfono móvil cuando se viaja dentro de la UE. El 72 % de los viajeros sigue limitando sus llamadas en itinerancia debido a su alto coste, aunque la mayoría sabe que los precios se han reducido desde 2006. Solo el 19% de las personas que usan servicios relacionados con Internet en el teléfono móvil en el extranjero considera justos los costes de los servicios de datos itinerantes (para navegar por Internet o consultar el correo electrónico).

La Comisión Europea quiere proponer que a partir de 2015 se elimine el roaming de todas las llamadas móviles dentro del territorio europeo, lo que potenciaría la creación de un "verdadero mercado único".