Los sindicatos presentan más de un millón de firmas para cambiar la reforma laboral
Toxo y Méndez denuncian que la propuesta del Gobierno se ha revelado como inútil para atajar el paro y es perjudicial para los trabajadores
Revertir una reforma laboral "inútil" y "perjudicial" para los intereses de los trabajadores es la razón por la que hoy CC OO y UGT han entregado en el Congreso de los Diputados un millón de firmas para que se tramite una iniciativa legislativa popular que modifique los efectos negativos que está teniendo. Los líderes de ambos sindicatos, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente, han sido los que han entregado en el registro de la Junta Electoral Central las 1.058.752 firmas, cifra que supone duplicar el mínimo que se exige (500.000) para que pueda entrar la iniciativa en la Cámara Baja.
Toxo y Méndez han encabezado una comitiva de más de un millar de personas que ha recorrido en manifestación las calles cercanas a la sede de la junta, situada junto al Congreso, y en la que también estaban los secretarios generales de CC OO Madrid, Javier López, y de UGT Madrid, José Ricardo Martínez; y un poco más atrás el coordinador general de IU, Cayo Lara.
Durante una breve intervención previa a la entrega de las firmas, Toxo ha denunciado que, un año después de que la reforma laboral haya entrado en vigor, la tasa de desempleo ha subido del 19% al 20,3%. En la misma línea, Méndez la ha calificado de inútil, porque no ha servido para tranquilizar a los mercados financieros, y perjudicial, porque ha seguido aumentando el desempleo y se ha reducido la contratación indefinida.
Por ello, Toxo y Méndez han pedido al Congreso que tramite su iniciativa, que da la vuelta como a un calcetín a la reforma aprobada por decreto del Gobierno, y que revierta los efectos negativos que en materia de contratación y creación de puestos de trabajo está teniendo su proyecto.
El texto de los sindicatos echa abajo los pilares básicos de la reforma. Por ejemplo, elimina la posibilidad de despedir por causas económicas justificadas -lo que conlleva la indemnización de 20 días por año trabajado- solo con la previsión de pérdidas. "Ha de poner en cuestión la propia viabilidad de la empresa", expresa la iniciativa. Otros cambios serían la prohibición de que agencias privadas de colocación intermediaran en el mercado laboral o imposibilitaría que el FOGASA pagara parte de los despidos procedentes.
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